Cuando trabajaban en diferentes lugares de la zona de minería ilegal de Puerto Maldonado, tres mineros hallaron trágica muerte la madrugada del domingo 30 de junio, en circunstancias parecidas, pero en lugares diferentes.
Fuentes policiales dijeron a INFOREGIÓN, que el primer accidente ocurrió en el predio minero de propiedad de Wilfredo Flores, ubicado en el sector conocido como “El Caño”, que se encuentra a la altura del kilómetro 115 de la carretera Puerto Maldonado-Mazuko, en donde murió el obrero William Carrillo Ochoa, de 36 años de edad.
Flores se encontraba realizando labores de extracción de material aurífero dentro de uno de los cráteres que suelen abrir los mineros ilegales con las “chupaderas”, cuando repentinamente fue aplastado por un deslizamiento de lodo y tierra. Esto sucedió en la zona de minería ilegal de La Pampa. Sus compañeros trataron de rescatarlo con vida, pero al remover la tierra pasaron varios minutos y Carrillo Ochoa, falleció por asfixia.
El otro accidente ocurrió en el predio minero de Piter Callo Barreda, ubicado en el sector San Francisco, a 117 kilómetros de Puerto Maldonado. Julio Cesar Mamani Tunti (27 años) y Gaudencio Eduardo Encarnación (31 años) también fueron sorprendidos por un derrumbe producido en la profundidad de un cráter, siendo sepultados por un alud de tierra y lodo.
El comisario de Mazuko, mayor PNP José Rodríguez Guadalupe, coordinó acciones con el fiscal de turno para trasladarse al lugar donde ocurrieron las tragedias a fin de realizar el levantamiento de los cadáveres y su posterior traslado a la morgue del instituto de Medicina Legal de Puerto Maldonado, para las investigaciones.