Un asaltante que se había introducido a una distribuidora de bebidas gaseosas para robar y al tratar de escapar tomó de rehén al administrador de la empresa amenazándolo con un arma de fuego en la cabeza, fue finalmente abatido a balazos por la policía.
Eran las 10 y 30 de la noche cuando el sujeto identificado como Jean Agüero Fuano, de 29 años de edad, ingresó a la distribuidora Selva Oriente, y en un descuido del vigilante se apropió de su arma con la que obligó al administrador, Luis Pinedo Reátegui, a entregarle un maletín con el dinero de la bóveda, casi cien mil soles.
En medio de esta acción, vecinos de la cuadra 8 de la Alameda Perú, donde se ubica la empresa, entre ellos un efectivo policial vestido de civil, se dieron cuenta de lo que ocurría y lanzaron piedras al portón de la empresa para tratar de evitar la fuga del asaltante, en tanto se esperaba la llegada de la policía.
Fue entonces que el delincuente comenzó a realizar disparos al aire, cogió del cuello al rehén y apuntándole todo el tiempo la cabeza lo arrastró por las calles cercanas. Agentes policiales rápidamente rodearon la zona y lo conminaron a rendirse pero como respuesta, Agüero Fuano siguió disparando.
Cuando ya había recorrido tres cuadras, un certero disparo efectuado por un policía le perforó el glúteo y casi simultáneamente otro lo hirió en el abdomen. En ese instante, el rehén logró soltarse y escapar a todo correr, mientras las autoridades redujeron al asaltante.
Aún con vida fue trasladado al Hospital de Tingo María, donde murió dos horas después a pesar de los esfuerzos de los médicos.
Por su parte, Pinedo Reátegui resaltó la preparación de los agentes policiales por la precisión demostrada y por la rapidez del accionar que le permitió salvar su vida y el patrimonio de la empresa
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