LIMA. La presidenta del Congreso de la República, Mirtha Vásquez, sostuvo que la inhabilitación política sí puede ser una sanción posible para funcionarios públicos que han lesionado gravemente el sistema y han mellado la confianza en las instituciones, en medio de la crisis sanitaria por el COVID-19. “Si los funcionarios se prestan para cometer actos tan graves que van en contra de bienes tan fundamentales como la vida y salud de la gente, sí creo que la inhabilitación puede ser una de las medidas que se aplique”, enfatizó.
En entrevista con CNN en español, la titular del Parlamento se refirió a los procesos iniciados contra el expresidente Martín Vizcarra, las ex ministras de Salud y Relaciones Exteriores, Pilar Mazetti y Elizabeth Astete, y los funcionarios implicados en la irregular aplicación de vacunas de Sinopharm fuera del estudio clínico llevado a cabo por la Universidad Peruana Cayetano Heredia y la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
“Lo menos que se puede pedir además de las sanciones penales, son las sanciones políticas sobre funcionarios que cometen estos hechos”, puntualizó. Mirtha Vásquez precisó que se necesita de voluntad política para que el proceso de investigación avance respetando el debido proceso y se pueda tomar una decisión antes que asuman las nuevas autoridades en julio próximo.
«Legalmente existe la posibilidad de que, cumpliendo estrictamente los plazos, se pueda llegar a obtener el resultado de una investigación que genere un impacto política y legalmente», consideró. La presidenta del Congreso también expresó su confianza en la labor del Ministerio Público y el Poder Judicial para hacer un análisis muy estricto del caso y realizar un proceso exigente, para sancionar de la manera más ejemplar si es que se comprueban las responsabilidades.
Estabilidad
Por otro lado, la titular del Legislativo se refirió a la situación política del país y a algunos sectores que intentan desestabilizar la Mesa Directiva del Parlamento. Vásquez Chuquilín reiteró que no se puede agravar la crisis. «A la actual crisis sanitaria, no podemos agregarle otra crisis política, como la vivida en noviembre. Necesitamos estabilidad política para poder enfrentar la emergencia”, señaló.