El ministro de Defensa Rafael Rey, reconoció hoy que el narcotráfico es el principal problema que se tiene en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, una zona que comparten las regiones de Ayacucho, Cusco y Junín y en donde opera el ala dura de los remanentes de Sendero Luminoso -Proseguir- liderados por Victor Quispe Palomino “José.
Asimismo aclaró que la prioridad del Gobierno en cuanto a las adquisiciones de equipamiento militar no son las referidas a la defensa externa, como tanques o equipos, sino al armamento que se requiere para enfrentar los problemas en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE en donde actúan el narcotráfico y el terrorismo.
“Quiero aclarar que la primera prioridad en adquisiciones de armamentos no son los tanques o equipos que eventualmente serían necesarios para la defensa externa, sino el armamento para el VRAE”, precisó Rey.
El titular de Defensa reconoció que efectivamente hubo retrasos de carácter burocrático en las adquisiciones de equipos para el VRAE, pese a que una de las primeras decisiones que adoptó cuando asumió el cargo fue dar prioridad a la compra de material “para enfrentar la guerra que ya tenemos contra el narcoterrorismo en esta zona”.
Manifestó que los recursos para las principales adquisiciones militares destinadas al VRAE están previstos en el presupuesto público de 2010. Detalló que 100 millones de soles serán financiados con recursos del Tesoro Público y los 283 millones de soles restantes provendrán de préstamos del Banco de la Nación.
El narcotráfico el principal problema
Reconoció asimismo que es el narcotráfico el principal problema que se enfrenta en la zona. «No es verdad que creamos que en el VRAE el principal problema es el terrorismo… el principal problema ahí es el narcotráfico», aclaró a la prensa.
Según el titular de Defensa “los narcotraficantes están unidos a los remanentes del terrorismo o se han convertido en terroristas a través de la simbiosis con el narcotráfico».
En ese marco de prioridad señaló que se ha dado énfasis a las adquisiciones militares desde helicópteros hasta visores nocturnos que son equipamientos que se requieren en la guerra contra los narcotraficantes.
La aclaración se da en momentos que Perú ha dispuesto unos 86 millones de dólares del presupuesto 2010 para las Fuerzas Armadas que operan en el VRAE y días después que el gobierno decretara que las fuerzas armadas releven a la policía en el control del VRAE prolongando hasta marzo el estado de emergencia y la restricción de las garantías constitucionales en la zona.
De acuerdo a información oficial del organismo que conduce la estrategia antidrogas en Perú, DEVIDA, el ingreso anual por la comercialización de cocaína asciende a 22.000 millones de dólares, casi el 17% del Producto Bruto Interno, PBI, nacional.
De ese total, el VRAE, una de las zonas más pobres del país produce el 60% de la cocaína fabricada en el país que es a su vez el segundo productor mundial del alcaloide después de Colombia.