La Policía Nacional destruyó otro laboratorio clandestino de fabricación de clorhidrato de cocaína de alta pureza, en lo que se constituye un nuevo golpe al narcotráfico. El laboratorio clandestino estaba ubicado en el sector de Chacrita, perteneciente al centro poblado Cachicoto, jurisdicción del distrito de Monzón, donde precisamente los cocaleros que abastecen de materia prima al tráfico ilícito de drogas continúan, por más de una semana, bloqueando la carretera bajo el argumento de defender sus cultivos.
En tres helicópteros, agentes especializados del Departamento de Operaciones Tácticas Antidrogas (DEPOTAD) de Tingo María, fueron trasladados a la zona, donde acciones de inteligencia operativa había detectado la existencia del laboratorio clandestino desde el cual se enviaba la droga hacia la costa del país, así como un inmueble rústico que servía de almacén de insumos químicos.
Los efectivos policiales estuvieron acompañados del fiscal José Huamán López, y al ingresar hallaron este laboratorio en una zona boscosa, el mismo había sido implementado con 2 cocinas a gas, 9 balones de gas propano, 2 molinos de grano, 1 alambique para reciclar acetona, 6 moldes de aluminio para prensar la droga, 10 ollas, 2 gatas hidráulicas, además de utensilios de plástico para almacenaje y separación de los insumos.
Seguidamente fue hallado un inmueble rústico en el que se almacenaban cerca de 5 toneladas de insumos, entre acetona y ácido clorhídrico, abundante cantidad de algodón, un grupo electrógeno, una lavadora y otros implementos.
Ante la imposibilidad del traslado en las aeronaves, el fiscal dispuso la destrucción e incineración de todo lo encontrado. Mientras tanto, los cocaleros de Monzón continúan el bloqueo de la carretera y muchos transportistas han denunciado, incluso, que quienes integran los piquetes que protegen estos bloqueos, piden cupos para que puedan transitar y desarrollar su trabajo.