Menaje: lo que no puede faltar en nuestra cocina y nuestra mesa

Comer puede ser sólo saciar una necesidad humana que se resuelve simplemente pidiendo una hamburguesa a domicilio. Pero no para quienes gustamos de la buena comida, de cocinar elaborado y de agasajar invitados. Para nosotros comer es mucho más que eso. Es considerar las preferencias de los comensales y complacerlas. Es hacer las compras con anticipación. Y es poner la mesa con todo lo necesario. 

En la concreción del acto de comer bien intervienen tres instancias. Cocinar el menú, servirlo y comerlo. Y en las tres etapas necesitamos del menaje. Ese conjunto de utensilios de cocina que usamos para cortar y cocer la materia prima del plato. Los elementos en los que vamos a servir el plato. Y la vajilla que vamos a disponer en la mesa para que nuestros comensales lo disfruten.

Hablamos ni más ni menos que de la olla en la que hervimos la pasta. De las sartenes que usamos para preparar dos salsas opcionales. Del colador con el que escurrimos y de las cucharas con las que mezclamos y revolvemos. De los cucharones con los que servimos y la fuente en la que lo hacemos. Y del rallador del queso. Todos los elementos que necesitamos y utilizamos para cocinar nuestro menú conforman el menaje de cocina.

Pero también existe un grupo de utensilios para servir que corresponden al menaje de mesa. Los cubiertos y los platos llanos, hondos, de postre y de sitio. Las ensaladeras, bandejas, fuentes y salseras. Las tazas de té o café, teteras, lecheras y azucareras. Los vasos para agua, cerveza o whisky, según el caso. Las copas de vino, champagne, licor y helado. Las jarras de vidrio o cristal.

Los infaltables del menaje de cocina

Equipar una cocina puede ser costoso. Por eso es importante comprar con conciencia e inteligencia. Adquirir productos de buena calidad que, aunque caros, nos garanticen durabilidad. Dentro de los indispensables para cocinar encontramos grandes utensilios como las ollas y sartenes. Y los pequeños instrumentos que necesitamos para cortar, pelar o rallar.

Grandes utensilios

Si tenemos la posibilidad de costearlas es ideal que las ollas y sartenes sean de acero inoxidable. Es un material durable, resistente a las altas temperaturas, antiadherente y fácil de limpiar. La olla precio de acero inoxidable supera el de la de aluminio, pero a largo plazo vale la pena. Una alternativa un poco más económica a considerar es el teflón de buena calidad. 

A menudo un menú requiere cocinar varias preparaciones en simultáneo. Por eso una cocina equipada debe incluir un juego de ollas. Una grande, de al menos 24 centímetros de diámetro. Una mediana, de 20 centímetros. Y una pequeña que podemos usar también como hervidor para leche o huevos. Una sartén mediana nos alcanza para completar un equipamiento satisfactorio en términos de grandes utensilios. 

Es imprescindible contar con una parrilla o plancha para cocinar carnes y pescados. Y óptimo incorporar un wok para salteados. Una fuente para horno mediana de vidrio templado o de acero inoxidable. Y si nos gusta hacer una torta de vez en cuando, tendríamos que contar con un molde de repostería mediano, de unos 24 centímetros de diámetro. 

No está mal que sumemos una rejilla o vaporera para cocciones al vapor. Y no podemos prescindir de bowls y ensaladeras. Si bien cada uno cumple una función en el menaje de cocina platos, tenemos la posibilidad de usarlos indistintamente. Ambos sirven para batir, mezclar y servir ensaladas. Idealmente tendrían que ser de vidrio porque no se contaminan con los ingredientes y es fácil eliminarles la grasa al lavarlos.

Utensilios medianos

Son utensilios que colaboran con las preparaciones de la cocina. Entre los más necesarios podemos mencionar una tabla para cortar y picar y dos o tres tuppers para guardar o freezar la comida. De igual modo entran en esta categoría un colador para escurrir pastas, legumbres y verduras que también puede usarse como tamiz de harina. Y un rallador para el queso y verduras.

Pequeños utensilios

Aquellos que caben en los cajones de la cocina. Incluyen una cuchilla, un cuchillo universal para cortar y picar y un cuchillo pelador. Contemplan una espumadera, un cucharón y una cuchara de madera para no rayar las ollas de cocinar. Además de una espátula de silicona para no dañar las sartenes. También integra los pequeños utensilios el pelador, para quitar la piel de las papas antes de hervirlas en nuestras ollas Perú. 

Los infaltables del menaje de mesa

Una vez que el plato está listo y pusimos a lavar la olla pequeña, la grande y la sartén, hay que servirlo y disfrutarlo. Es en este momento que entran en juego todos los elementos que el comensal encuentra sobre la mesa. Aquello que usará para comer y beber. Y no hablamos sólo del plato, los cubiertos y la copa. 

Platos y recipientes

Según el manjar que sirvamos, dispondremos en la mesa platos llanos u hondos. Podemos sumar platos para el pan y, de haber postre, platos de postre. También colocaremos panera, ensaladeras, bandejas y salseras en función del menú. Si se trata de un desayuno o merienda, ofreceremos tetera y/o cafetera, tazas acordes, lechera y azucarera. Y una fuente de varios pisos para ubicar las tortas y dulces.

Cubertería

Junto a los platos colocaremos tenedores y cuchillos. De acuerdo con el menú que servimos serán para carne, pescado, lunch y postre, si éste los requiere. Y cucharas de sopa, de postre y de helado, según amerite. Mientras que junto al resto de los recipientes ubicaremos cubiertos para servir, como pala de tarta, cuchara de ensalada o pinzas.

Cristalería

Dentro de esta categoría entran los diferentes vasos, correspondientes a cada bebida. De agua, de whisky, de cerveza o de licor. Las copas, para vino blanco o tinto, para el agua y para brindar con champagne o sidra. Para el helado de postre y para el brandy, el licor o el coñac de la sobremesa. También entran aquí las jarras, poncheras y botellas.