Los productores de papaya de la jurisdicción de Masisea expresaron su preocupación por la baja de los precios de esta fruta, y protestaron porque los mayoristas sòlo les pagan cincuenta centavos por cada cajón.
Este precio apenas les permite cubrir sus costos de producción y los obliga a vender entre 150 y 200 cajones de papaya para recibir apenas unos cien soles. En cambio, los mayoristas hacen el negocio redondo al vender en el mercado de Pucallpa cada ciento de fruta a unos 120 nuevos soles.
Los campesinos pidieron el mejoramiento de la carretera hasta Santa Rosa de Masisea, pues les permitiría sacar sus productos directamente hacia Pucallpa y sin intermediarios. Por el momento, dicha vía es apenas una trocha carrozable, que se recorre en dos horas de viaje, tiempo que es crítico para la conservación de la papaya.