Manifiestan indignación ante pasado senderista de parlamentaria Elsa Malpartida

El exviceministro del Interior, Carlos Basombrío, publicó en la web de Semana Económica sus impresiones sobre la denuncia de El Comercio respecto del pasado senderista de la parlamentaria andina Elsa Malpartida. En un texto, que el propio analista calificó como un «desahogo ante una indignación profunda», sostiene que Malpartida Jara no debería representar al Perú ante el Parlamento Andino.

Indignación

(Carlos Basombrío)

Este no es un artículo de análisis, tengo la cabeza demasiado caliente como para poder hacerlo. Es un desahogo para una indignación profunda.

La denuncia de El Comercio sobre la parlamentaria Elsa Malpartida es gravísima.

El Comercio ha hecho público documentos que prueban que ella estuvo en Sendero varios años como “mando” (contra su voluntad, según ella) y que hay un expediente de arrepentimiento donde reconoce sus culpas y “echa” a otros senderistas a cambio de beneficios.

No olvidemos que la Comisión de la Verdad y Reconciliación dijo que Sendero Luminoso “fue el principal perpetrador de crímenes y violaciones de los derechos humanos”.

No sé si legalmente está impedida de participar en las elecciones y ser congresista, pero definitivamente ética y políticamente no puede estar allí. Sendero fue el peor enemigo de nuestra democracia (“democracia burguesa”) y la fue minando y minando, poniendo en bandeja la posibilidad del golpe fujimorista.

Mucho ha costado recuperarla y es inadmisible que alguien que perteneció a esa organización criminal sea hoy uno de sus miembros. No se trata de negarle el derecho a nadie de arrepentirse y rehacer su vida. El tema es otro: hoy ocupa una curul en una institución democrática, alguien que le ocultó al país su condición de miembro de Sendero Luminoso, la organización más criminal y sanguinaria de nuestra historia.

Otra raya más al tigre en el desastre que fue Ollanta Humala para escoger a su gente. Pensar que estuvo a un tris de ganar.