La Procuradora Antidrogas Sonia Medina consideró que la lucha contra el narcotráfico y el lavado de activos debe ser una política de Estado y no sólo del Gobierno de turno, que permita fortalecer las instituciones comprometidas en la lucha frontal contra este flagelo y fijar correctivos para que el poder punitivo del Estado se traduzca en sanciones significativas que generen efectos positivos de seguridad nacional e internacional.
En declaraciones a INFOREGIÓN, calificó como grave la problemática del tráfico ilícito de drogas y el lavado de activos impulsados por la demanda del narcotráfico, y señaló que es indispensable solucionar la ausencia del Estado en las cuencas cocaleras y la falta de sanción a la producción de coca ilegal.
Medina alertó asimismo que otro de los tropiezos del Estado en la lucha contra la producción ilegal de hoja de coca se produce porque en el Congreso y en los gobiernos regionales y locales, los defensores de la producción ilegal han logrado alcanzar estatus político que les permite proteger las actividades ilegales utilizando el marco político, social y legal, bajo la justificación o distorsión de la defensa de los derechos humanos.
«El problema es sumamente grave, la producción para el consumo va en aumento y también los delitos conexos, el tráfico ilegal de armas, la trata de personas para *burriers*, la contaminación ambiental, 10 mil niños y adolescentes trabajando en pozas de maceración, 720 toneladas de agroquímicos utilizadas al año, 17 mil toneladas de insumos químicos usadas por año, dos millones de hectáreas deforestadas por el cultivo de coca, erosión de las tierras, tala de árboles y quema de bosques tropicales. La violencia y corrupción que genera el narcotráfico es alarmante y cada vez se incrustan más en el aparato social y en el sistema privado», alertó.