El embajador de Estados Unidos en el Perú, Michael McKinley, manifestó que la lucha contra las drogas es una tarea que compete tanto a los países productores como a los consumidores, por lo que – consideró – debe haber un vínculo más directo entre estas naciones.
En ese sentido, dijo que existe un interés de trabajar conjuntamente con la Unión Europea para combatir el narcotráfico, pues este bloque apoya programas de desarrollo alternativo y de interdicción en sus fronteras.
“Son diferentes enfoques sobre las temática (de la lucha antidrogas) Un enfoque en sí no es la solución, son múltiples los esfuerzos que se tienen que llevar a cabo”, puntualizó.
«Es mejor gastar en servicios sociales que en armas»
En otro momento, el embajador indicó que es mejor gastar en servicios sociales antes que en armas, cuando esto sea posible. No obstante señaló que ante «crisis mayores» se deben tomar las decisiones que sean necesarias.
Al respecto, McKinley indicó que, en términos generales, su país espera que los temas sociales, económicos y de justicia sociales “sean prioritarios para las sociedades” e indicó que ésa ha sido la política seguida por su país.
Adquisición de material bélico es decisión soberana de cada país
El diplomático precisó no obstante, que la adquisición de material bélico es, al final, una decisión soberana de cada país.
Agregó que, si bien Estados Unidos es uno de los países proveedores de armas, tiene una clara trayectoria para desanimar tensiones que surgen eventualmente entre países de la región.
Como ejemplo, comentó la participación estadounidense en la solución de los conflictos entre Perú y Ecuador, después de 1995, y en algunos casos presentados en Centroamérica.
“Seguimos siempre pendientes de la importancia de que el hecho de comprar de armas no se vuelva en algo que provoca tensiones”, manifestó.
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