Aproximadamente a las 2 a.m. del pasado 5 de agosto, un policía y un guardaparque notaron una embarcación que intentaba pasar desapercibida por el río Nanay. Esta, que estaría transportando productos ilegales, se desplazaba con el motor apagado aprovechando la corriente del mismo río. El guardaparque avisó a sus compañeros y encendieron un faro para identificar la embarcación. Sin embargo, los tripulantes encendieron rápidamente el motor y fugaron.
En el camino dispararon tres veces hacia el puesto de vigilancia Yarana, de la Reserva Nacional Allpahuayo Mishana, ubicado en la parte media del Nanay, que cuenta con efectivos policías desde inicios de este año con el objetivo de vigilar a las embarcaciones que puedan transportar combustible e insumos empleados para la minería ilegal.
Cabe recordar que en febrero, marzo y junio de este año se realizaron operativos contra la minería ilegal en el mismo río, pero esta actividad no solo continúa sino que además los mineros han amenazado tanto a la población como a guardaparques y policías que advierten y denuncian sobre este delito. Según un informe del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado peruano (Sernanp), personas de nacionalidad colombiana y brasilera estarían detrás de estas amenazas.
¿Qué están haciendo las autoridades?
La Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA) de Maynas informó que investiga y recopila información para dar con los responsables de esta actividad. En este sentido, ha logrado reunir datos sobre la ubicación exacta de 14 dragas, entre los meses de julio y agosto. Sin embargo, según indica el fiscal Bratzon Saboya, la FEMA no cuenta con los recursos ni facultades para realizar un operativo sin el apoyo de la Marina de Guerra.
Fuente: SPDA Actualidad Ambiental