OYÓN. Clelio Julca Girón y su esposa Flavia Rosales Huaranga tienen cinco hijos, la mayor de 17 y el menor de 3 años. Viven en Caujul, uno de los seis distritos de la provincia de Oyón, en la sierra norte de la región Lima. La familia es usuaria del proyecto Haku Wiñay de Foncodes, y ha desarrollado capacidades y habilidades para ampliar su negocio “Textilería Los Pumas”, que confecciona mantas, pullos, gorros y boinas, frazadas, bolsos bordados y otras prendas.
Es uno de los veinte emprendimientos rurales cofinanciados por Haku Wiñay en la zona, proyecto productivo de Foncodes, programa del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, para diversificar los ingresos familiares en el marco de la estrategia de inclusión económica que encarna esta intervención.
Don Clelio Julca trabaja con dos de sus hermanos, Edwin y Jesús. “Me dedico además de la chacra, a tejer y hacer prendas como mantas, bolsos, frazadas, con la lana que saco de mis ovejas y también con lana sintética que compro. Hemos sido uno de los ganadores del primer concurso de Haku Wiñay y compramos dos telares, uno grande y otro chico, una máquina de coser y otros implementos. Y también contratamos a un asistente comercial para vender mejor nuestros productos”, indicó. El negocio de Clelio Julca fue uno de los que participaron en la Tercera Feria Distrital de Emprendimientos Rurales Inclusivos en la plaza de Caujul.
Jessica Salazar Roque, Jovita Durán Plácido y Ruth Mattos son socias del emprendimiento “Creaciones Punto Cruz Dumaza”. Confeccionan manteles y servilletas, cojines, mandiles y prendas similares con tela cañamazo. Y se dedican también a producir de mascarillas de tela cumpliendo las normas técnicas del Ministerio de Salud. Usan la microfibra “Notex que filtra el aire, reduciendo la propagación del virus del Covid-19.
“Nosotros hacemos mascarillas, y hemos vendido a los municipios de Caujul y Naván, y en otras comunidades cercanas”, relató doña Jessica. “Por la pandemia las ventas han caído, pero seguimos produciendo, ahora también hacemos polos como éste”, indicó orgullosa, mostrando lo que lleva puesto.
“Mejoramiento de la calidad del melocotón”, es otro negocio presente en la feria. Es dirigido por Juvenal Toribio Cauchi. Lo vende como fruta, pero le da valor agregado al transformándola en melocotones en almíbar y néctar de melocotón, que vende envasado en frascos de vidrio.
Los visitantes de la feria Haku Wiñay también pudieron adquirir diversos productos como paltas, ciruelas, quesos, yogurt, manjar blanco, miel de abeja, carnes de ovino y de cerdo, trucha y platos de la gastronomía local y regional.
El coordinador técnico de Haku Wiñay en Caujul, Luis Villagómez, explicó que el proyecto además de promover negocios rurales impulsa el fortalecimiento de los sistemas de producción familiar, capacidades financieras y la mejora de las viviendas rurales para hacerlas más saludables. Por su parte, el alcalde distrital de Caujul, Abel Salazar Ríos dijo que la Municipalidad trabaja articuladamente con Foncodes, brindando apoyo logístico a Haku Wiñay para el cumplimiento de sus actividades y metas.
El jefe de la Unidad Territorial Lima de Foncodes, Teófilo Alata San Miguel, dijo que el proyecto Haku Wiñay en el distrito de Caujul trabaja con 400 hogares y una inversión de S/2 millones. En el ámbito rural de la región Lima Provincias, Haku Wiñay tiene 6548 familias usuarias en 39 proyectos productivos con una inversión que asciende a S/31.08 millones, precisó el funcionario, informó el Midis a INFOREGIÓN.