Uno de los peligros más comunes que presenta un volcán, aún si no está en actividad, son los lahares o flujos de barro y escombros volcánicos. ¿Cómo se originan? Un volcán en erupción emite importante volumen de ceniza y bloques incandescentes que se depositan en sus laderas. Este material, al ser removido por el agua de lluvia o el derretimiento de un glaciar, da lugar a los lahares, flujos que tienen un aspecto similar a la mezcla de concreto y que se desplazan aprovechando la pendiente del terreno. Dependiendo el porcentaje de agua involucrada, además de la pendiente, los lahares pueden recorrer decenas de kilómetros.
En Arequipa, tanto el volcán Misti como el Chachani tienen el potencial de generar lahares en caso de la ocurrencia de lluvias intensas o erupciones volcánicas. Existen evidencias de lahares ocurridos en el pasado que son visibles en las principales torrenteras que se prolongan desde el volcán Misti (quebradas San Lázaro, Huarangal, entre otras) y que atraviesan los distritos de Alto Selva Alegre, Miraflores, Mariano Melgar, Paucarpata y el cercado de Arequipa. En conjunto, más de 200 000 personas están en riesgo ante este tipo de peligro, muchas de ellas por haber construido sus viviendas en los cauces de las quebradas o alrededores.
En los últimos años se han desencadenado lahares ligados a lluvias que han involucrado volúmenes de agua importantes. Podemos citar el flujo del 8 de febrero de 2013 que ocasionó la muerte de 6 personas y numerosos daños a largo de la av. Venezuela. Para mitigar los efectos de los lahares, no se debe descuidar la implementación y ejecución de medidas de prevención, tales como la limpieza de los cauces de quebradas, construcción de muros de contención, etc.
En este contexto, el Instituto Geofísico del Perú (IGP) monitorea en tiempo real el posible descenso de lahares mediante el uso de redes de vigilancia geofísica instaladas en las laderas de los volcanes. Recientemente, a través de un proyecto de investigación básica presentado a PROCIENCIA (Programa Nacional de Investigación Científica y Estudios Avanzados) del Concytec, el IGP obtuvo el financiamiento para estudiar en detalle los lahares generados por el Misti e implementar un sistema de monitoreo para reforzar el ya existente.
Con ello, el IGP optimizará la emisión de alertas oportunas sobre el descenso de este tipo de flujos, lo que beneficiará la gestión del riesgo por parte de las autoridades en beneficio de la población. IGP: «Ciencia para protegernos, Ciencia para avanzar».