La empresa de capitales brasileros quiere celebrar sus 35 años en el país concretando uno de sus proyectos más ambiciosos, la petroquímica en el sur. Ricardo Boleira adelanta que están en conversaciones con el Gobierno con ese objetivo.
La semana pasada anunciaron que buscan trasladar el EIA de Kuntur a su proyecto para adelantar las obras del gasoducto del sur. ¿Qué posibilidades hay de que eso se concrete?
RB: Hay la posibilidad efectivamente, se está buscando la parte técnica para arrancar con las obras. La idea es atacar la parte de la selva donde está la estación Las Malvinas para aprovechar la época de lluvias porque de lo contrario no tenemos navegabilidad. Estamos actuando para poder llevar lo que se pueda de equipos y materiales a la zona. Pensamos poner un campamento en Kiteni y en el 2015 –después del período de lluvia– comenzar con el trabajo fuerte, para eso ya compramos parte de las tuberías.
Estos avances parten del supuesto de que se encontrará la herramienta legal para usar el EIA de Kuntur.
RB: Sí, es cuestión de días. Además necesitamos otros permisos, que son parte del proceso natural de los proyectos. Tenemos que pedir apoyo para anticipar las obras porque hay expectativa de la población en la zona para que se ejecuten.
¿Sigue en sus planes la petroquímica?
RB: Por supuesto, la petroquímica es una consecuencia natural del gasoducto. A través de Braskem estamos en contacto con el Gobierno para ver de qué manera se puede ejecutar, cuáles son las condiciones, qué se puede adelantar mientras se construye el gasoducto. Es un tema complejo, no es una decisión sencilla, pero hay un interés muy grande de Braskem por hacerla.
¿Para eso necesitarían un ducto adicional?
RB: Puede ser, pero también se podría poner una planta fraccionadora al final del ducto. Hay opciones, por supuesto que lo mejor sería poner otro ducto ahora que se está construyendo la línea de gas. Estamos estudiando en este momento qué sería lo mejor.
Si bien el gasoducto es su proyecto más mediático, tengo entendido que el más próximo a su conclusión es Olmos.
RB: El proyecto de irrigación Olmos está ya en la fase de conclusión de las pruebas con agua. Le seguirá la certificación final por parte del cliente, para ver si realizamos la inauguración a inicios de noviembre.
¿Qué impacto inmediato esperamos tras el inicio de operación de un proyecto esperado por décadas?
RB: El impacto principal es que la garantía de tener agua va a estimular las inversiones de las empresas que han comprado tierras, que pueden ahora con seguridad comenzar a trabajar.
Ustedes se quedaron con unos lotes. ¿Qué destino darán a esas tierras?
RB: Casi el 70% ya fue vendido. El restante 30% está en proceso, estamos haciendo algunos eventos de divulgación en el exterior.
¿No tienen la intención de desarrollarlos con alguna empresa del grupo?
RB: No, las vamos a colocar a terceros. Estamos negociando con algunas empresas del país y de afuera. En diciembre ya debemos tener resuelto eso.
¿Cuál es el costo actual por hectárea?
RB: En la primera subasta el precio estuvo entre US$4.000 y US$4.500 por hectárea. Las últimas las hemos vendido entre US$6.000 y US$6.500. Ahora que hay agua esperamos que se revaloren más y por eso estamos aguantando una parte para venderla al final. Pensamos que puede llegar a US$7.000 y US$7.500 la hectárea.
A fines del año pasado ganaron Chavimochic, ¿qué avances hay?
RB: Estamos en proceso, ya firmamos los contratos y ahora estamos en proceso de preparación y aprobación de los estudios. Ya se aprobó la parte inicial para hacer los accesos, el campamento, la primera parte de la obra misma. Debemos ingresar en el área misma entre noviembre y diciembre. Las obras más fuertes comenzarán el próximo año.
¿Y Chaglla?
RB: Chaglla está al 70% de avance. Pensamos terminar las obras a fines del 2015. La presa –que tiene 200 metros de altura– ya tiene una cota de 160 m. El 90% de los túneles ya están construidos y la línea de transmisión está avanzada. A partir de agosto comenzaremos con el llenado de la presa.
¿Cuándo comienza a aportar energía al sistema eléctrico?
RB: Con más seguridad en enero del 2016, pero puede darse a partir de diciembre del próximo año. Son 456 MW, es decir que es la segunda más grande del país.
Chaglla era su punta de lanza como operadores de sus propios proyectos. ¿Han avanzado algo más en este objetivo?
RB: Sí. Estamos en proceso de petición de licencia definitiva para otras hidroeléctricas. En nuestra previsión para el próximo año tenemos una hidroeléctrica en Tingo María, que se llama Belo Horizonte. Para el futuro tenemos a Chadin II, que se ubica en el río Marañón, entre Amazonas y Cajamarca.
¿Qué características tiene Belo Horizonte?
RB: Es una hidroeléctrica menor, que está cerca de Chaglla. Su potencia es de 180 MW y la inversión prevista debe superar los US$800 millones.
¿Ambos proyectos atenderán la demanda local?
RB: Sí, estamos esperando la nueva subasta de generación de energía de Pro Inversión prevista para el 2015 para incluir a Belo Horizonte y Chadin II (Silvia Mendoza Martínez para El Comercio).
DATO
La firma de capitales brasileros tiene 35 años en el Perú, durante los cuales ha ejecutado 66 obras. La operación en el país factura unos US$1.000 millones al año, lo que la convierte en el tercer mayor mercado de Odebrecht fuera de Brasil.