Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Exeter (Reino Unido) ha puesto de manifiesto que la mitad de la población mundial está expuesta a un aumento de la contaminación, a pesar de los esfuerzos que se están realizando para mejorar la calidad del aire.
«Si bien se ha demostrado que las políticas a largo plazo para reducir la contaminación atmosférica son eficaces en muchas regiones, especialmente en Europa y los Estados Unidos, todavía hay regiones que tienen niveles peligrosamente altos de contaminación atmosférica, algunos hasta cinco veces superiores a las directrices de la Organización Mundial de la Salud», han comentado los investigadores.
De hecho, el organismo de Naciones Unidas ha estimado que más de cuatro millones de muertes anuales pueden atribuirse a la contaminación del aire exterior. Entre las principales fuentes de contaminación atmosférica por partículas finas figuran el uso ineficiente de la energía por parte de los hogares, la industria, los sectores de la agricultura y el transporte y las centrales eléctricas de carbón.
Para leer texto completo de Ecoticias haga click aquí