La curva del pato: Una llamada de atención sobre nuestro consumo energético

En el sector energía, lograr una matriz energética con mayor participación de energías renovables es ineficiente si no sabemos cómo y cuándo usarla. Al ser la energía solar una de las más aprovechables y cuyo costo disminuye aceleradamente a comparación de otras fuentes de generación sostenibles, es innegable que podría tener una mayor relevancia en mercados futuros. 

Según un estudio realizado en el 2018 por el Ministerio de Energía y Minas, este tipo de energía tuvo una participación de 0,4% dentro de la producción interna de energías primarias en el país, con un incremento de 67,5% en su generación a comparación del 2017. Asimismo, se indicó que los tres principales consumidores de energía eléctrica fueron el sector industrial, minero metalúrgico y el residencial.

“La curva de pato”, es un peculiar nombre para una gráfica que muestra un preocupante comportamiento que existe entre la capacidad de generación de energía solar y la demanda de la misma. Se sabe que la mayor capacidad de generación se da alrededor del mediodía, coincidentemente cuando nuestro consumo es mínimo. Por otro lado, por la noche, esta capacidad es casi nula, mientras que nosotros llegamos a nuestro máximo pico de consumo. 

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es CAISODuckChart_Scaled_400pxHigh.png
La curva del pato (Foto: cQuant.io)

Las “horas punta” (desde las 18.00 h hasta las 23.00 h en el Perú), son aquellas en las que se genera y distribuye la energía con mayor dificultad debido a los inconvenientes que surgen originados por el mayor consumo, que se da principalmente por el uso en residencias, la necesidad de iluminar las calles y al sector industrial. Por este motivo, se suelen utilizar plantas de generación que trabajan con combustibles fósiles para poder cubrir la demanda; resultando el incremento del costo de la energía para algunas opciones tarifarias.

Cambiar los hábitos de consumo es una alternativa simple, pero muy efectiva para solucionar este problema. La manera más económica es utilizando los electrodomésticos en un horario oportuno como lo son las primeras horas de la mañana (en las que el consumo es mínimo) o aprovechando la luz del día para realizar distintas tareas. Otra opción, un poco más cara, es el uso de dispositivos ahorradores como focos LED, enchufes inteligentes o electrodomésticos con mayor eficiencia energética. Sea cual sea la alternativa que elijas, estarás haciéndole un favor al planeta y a tu economía.

*Artículo escrito por Eduardo Del Aguila, egresado de Ingeniería Mecánica de la PUCP, para INFOREGIÓN.

Los comentarios están cerrados.