LIMA. El presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Salas, consideró que la dificultad más grande que se ha presentado en lo que va su gestión ha sido la contratación de 16 mil fiscalizadores para vigilar las 88 mil mesas de sufragio diseminadas en el país para evitar la concentración de los electores. Añadió que el problema fue materializar esos contratos en el contexto de la pandemia.
Así se expresó la máxima autoridad del JNE en entrevista exclusiva para la Red de Medios Digitales del Perú, de la cual forma parte InfoRegión. Sobre los fiscalizadores, Salas añadió que su contratación no contó con alguna dificultad económica debido a que el Parlamento comprendió la importancia de dicha medida para garantizar la limpieza de los comicios.
En cuanto a los resultados de los comicios, dijo que «si hubiese un empate muy ajustado, lo que va a definir el tema es la votación de la ciudadanía. No creo que haya un empate exacto, la escasa diferencia de votos seguramente será la que definirá el tema. Los medios tecnológicos han superado la valla de la especulación. Hoy son más exactos que antes. Todas las actas van a ser digitalizadas y vistas por la colectividad».
Agregó para la limpieza de los resultados se cuenta con la presencia de veedores internacionales, de personeros de los partidos así como el resguardo policial. Enfatizó que «no hay la posibilidad de defraudar. Es un alegato que no tiene sentido que además daña la democracia en el Perú». Citó que no habrá cambio de acta o de votación, pues «todo está muy controlado».
Respecto a los ciudadanos peruanos residentes en Venezuela, Chile, Paraguay y Aruba que no podrán votar en los comicios generales, dijo que Venezuela «no estaba ya considerada porque el año pasado teníamos problemas de esa naturaleza (…) y esto es una determinación de la ONPE, no del JNE». En Chile, «solo algunas circunscripciones van a permitirse esta posibilidad (…) No tenemos claridad como JNE si (los electores peruanos) votarán o no», acotó.