El analista en temas de narcotráfico Rubén Vargas invocó a no dejar de erradicar la hoja de coca ilegal existente en Aguaytía, provincia de Padre Abad (Ucayali), que es la zona de mayor crecimiento en esta actividad ilegal del orden del 73% de acuerdo con el último reporte de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés).
En conversación con el programa radial Diálogo Ciudadano, que emite INFOREGIÓN los fines de semana, dijo que el hecho de que se sigan encontrando laboratorios de producción de pasta básica de cocaína en la zona de erradicación es motivo suficiente para seguir erradicando la hoja de coca que termina en las referidas instalaciones de las mafias dedicadas al tráfico ilícito de drogas.
«No podemos permitir o seguir tolerando que se siga cultivando hoja de coca con el argumento de que se va al consumo legal o tradicional. Como se están encontrando laboratorios de producción de pasta base de cocaína, las labores tienen que continuar», dijo.
«No puede ni debe detenerse la erradicación en Aguaytía, porque si se retrocede, definitivamente no solamente se pierde una oportunidad de recuperar Aguaytía de las garras del narcotráfico, sino que estaríamos permitiendo que esta lacra avance y se consolide a nivel nacional, enfatizó.
Posición estratégica
En ese sentido, dijo que Aguaytía tiene una posición estratégica para el narcotráfico pues sirve como puente con la zona de la selva central, con el río Ene, desde donde puede servir de ingreso a la zona del vallle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), otra cuenca con fuerte presencia del narcotráfico.
Por eso, recordó que no debe sorprender la violencia con la que a veces los cocaleros se enfrentan a los erradicadores y a los efectivos policiales que le brindan seguridad a las labores de reducción de cultivos ilegales.
Vargas Céspedes señaló esto en referencia con el enfrentamiento entre cocaleros y efectivos antidrogas ocurrido la semana pasada y que dejó como saldo dos personas muertas.