Internet, neurociencias y los saltos educativos

Janna Anderson, de la universidad Elon y Lee Rainie, del Pew Internet and American Life Project, dieron  a conocer sus hallazgos sobre el desarrollo cognitivo de la nueva generación,  basándose en entrevistas a 1,000 reconocidos  líderes del pensamiento moderno en relación al impacto que ha tenido internet con los cambios ambientales conexos,  en el cambio de las  capacidades cognitivas de los niños (Megan Garber, Kids’ Cognition Is Changing—Education Will Have to Change With It, 29 02 2012).

Encontraron coincidencias en las menciones a la neuroplasticidad del cerebro, la capacidad de cumplir múltiples  tareas a la vez, la híperconectividad que reduce la paciencia y concentración, y la cultura de expectativa de gratificación instantánea que trae el estar siempre conectado a internet. Así mismo encontraron consenso de que tendrá que haber una revolución educativa  actualizando el sistema para responder a las nuevas realidades del ambiente intelectual, ya que la  escolaridad bien desarrollada para dominar la nueva alfabetización mediática y tecnológica dará enormes ventajas a quienes accedan a ella.

Así mismo los expertos predicen cuáles habrán de ser las habilidades más deseables para los jóvenes hacia 2020. En especial, resolución de problemas a través de la cooperación, externalizar tareas  y similares; habilidad para encontrar de modo efectivo la información online; distinguir la calidad y veracidad de los hallazgos online; sintetizar o combinar factores y detalles de diferentes fuentes de modo coherente ;  concentrarse; y habilidad para distinguir entre la señal y el ruido conforme se va acumulando grandes cantidades  de información.

Hay dos preguntas que emergen de todo esto:  1) Son éstas habilidades que deben adquirir los alumnos o primeramente los profesores (cuyos alumnos están más hechos a estas características de modo natural).  2) Si bien todas estas habilidades pueden ser enseñadas, ¿querrán los alumnos  aprenderlas en la escuela (a la manera adulta) o fuera de ella (a su manera)?

Sean cuales fueran las respuestas, la revolución educativa es inevitable y mientras más se demoren los países en iniciarla, mayor será la brecha entre los ganadores y los perdedores. ¿En cuál de los grupos estará el Perú?