Interdicción y reducción de cultivos ilegales son fundamentales en la lucha contra el narcotráfico

Las acciones de interdicción y la reducción, programada o voluntaria, de cultivos ilegales de hoja de coca son fundamentales en la lucha contra el narcotráfico, sostuvo en analista en temas de narcotráfico Jaime García.


En diálogo con INFOREGIÓN, sostuvo que las medidas antes mencionadas deben ser parte de un plan de desarrollo que permita a los agricultores trabajar de una manera lícita y salir de la ilegalidad que significa abastecer al narcotráfico de materia prima.


Añadió que la estrategia debe plantearse de forma abierta y transparente, para así formar parte de una agenda o plataforma en la que los peruanos estemos de acuerdo.


«No se puede prometer recursos para desarrollo si no hay un programa de reducción de cultivos ya sea en forma voluntaria o ya sea de forma programada», comentó.


Falta decisión política para luchar contra el narcotráfico


En otro momento, García lamentó que no haya existido voluntad política para plantear antes una reducción de cultivos en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), pues señaló que esto ha traído como consecuencia un significado incremento de las hectáreas dedicadas al cultivo de hoja de coca ilegal en esa zona.


Al respecto, detalló que, en el año 2002, había 14 mil 170 hectáreas de hoja de coca en el VRAE, cifra que en el 2007, aumentó a 16 mil 19 hectáreas, de acuerdo a los informes de la Organización de Naciones Unidas (ONU).


Asimismo, indicó que la productividad se incrementó de dos toneladas por hectárea en el 2000 a 4.4 toneladas por hectárea, según el último reporte de la ONU. «Está creciendo de manera desproporcionada el cultivo de hoja de coca ilegal que va hacia el narcotráfico», comentó.


Finalmente, el especialista en temas de narcotráfico invocó a las autoridades a pedir la participación de las diferentes organizaciones sociales en la lucha frontal contra el narcotráfico. «Si esto no es así, corremos el riesgo de convertir algunas regiones en narcoregiones», puntualizó.

Interdicción y reducción de cultivos ilegales son fundamentales en la lucha contra el narcotráfico

Las acciones de interdicción y la reducción, programada o voluntaria, de cultivos ilegales de hoja de coca son fundamentales en la lucha contra el narcotráfico, sostuvo en analista en temas de narcotráfico Jaime García.


En diálogo con INFOREGIÓN, sostuvo que las medidas antes mencionadas deben ser parte de un plan de desarrollo que permita a los agricultores trabajar de una manera lícita y salir de la ilegalidad que significa abastecer al narcotráfico de materia prima.


Añadió que la estrategia debe plantearse de forma abierta y transparente, para así formar parte de una agenda o plataforma en la que los peruanos estemos de acuerdo.


«No se puede prometer recursos para desarrollo si no hay un programa de reducción de cultivos ya sea en forma voluntaria o ya sea de forma programada», comentó.


Falta decisión política para luchar contra el narcotráfico


En otro momento, García lamentó que no haya existido voluntad política para plantear antes una reducción de cultivos en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), pues señaló que esto ha traído como consecuencia un significado incremento de las hectáreas dedicadas al cultivo de hoja de coca ilegal en esa zona.


Al respecto, detalló que, en el año 2002, había 14 mil 170 hectáreas de hoja de coca en el VRAE, cifra que en el 2007, aumentó a 16 mil 19 hectáreas, de acuerdo a los informes de la Organización de Naciones Unidas (ONU).


Asimismo, indicó que la productividad se incrementó de dos toneladas por hectárea en el 2000 a 4.4 toneladas por hectárea, según el último reporte de la ONU. «Está creciendo de manera desproporcionada el cultivo de hoja de coca ilegal que va hacia el narcotráfico», comentó.


Finalmente, el especialista en temas de narcotráfico invocó a las autoridades a pedir la participación de las diferentes organizaciones sociales en la lucha frontal contra el narcotráfico. «Si esto no es así, corremos el riesgo de convertir algunas regiones en narcoregiones», puntualizó.