Frente a los nuevos desafíos que conlleva el aislamiento social, diversas comunidades de Áncash, del área de influencia operativa de Antamina, vienen participando en programas productivos agrícolas y ganaderos, siguiendo las normas de bioseguridad estipuladas por las autoridades nacionales. De igual manera, a través de internet, reciben capacitación constante, asistencia técnica de parte de especialistas, recomendaciones para la comercialización de sus productos, entre otros aspectos que contribuyen al fortalecimiento de su economía.
En la provincia de Huarmey, en concordancia con el proceso paulatino de reactivación económica, unos 70 productores vienen recibiendo asistencia técnica para el manejo agronómico del cultivo de palto de las variedades Fuerte y Hass, para su comercialización y exportación. Actualmente, se vienen aprovechando 87 hectáreas de terreno y se estima posicionar a Huarmey como una de las principales zonas productoras de palta a nivel nacional e internacional.
Por su parte, en el distrito de San Marcos, unos 200 productores continúan recibiendo capacitación constante para la crianza y comercialización de cuyes, además de implementos para el cuidado de estos animales, como calaminas, mallas, listones, de madera, comederos, etc. Se trata de una iniciativa financiada por Antamina y ejecutada por CÁRITAS-Huari, que ha permitido incrementar la comercialización de cuyes en el último año, generando oportunidades de trabajo y mayores ingresos para las familias de dicho distrito.
De igual manera, los ganaderos de la comunidad campesina de Huaripampa, en la provincia de Huari, se vienen beneficiando del programa “Manejo ganadero y mejoramiento genético de ovinos”, desarrollado por Antamina y ENCODE SAC. El mismo viene logrando el mejoramiento genético de ovinos de la raza Corriedale y el manejo técnico de 30 hectáreas de pastos asociados.
A la fecha, se ha conseguido un avance de 63 ovinos inseminados y se espera que al cierre del mes se logre 250 borregas inseminadas, buscando mejorar la calidad genética de las crías, mayor peso, calidad cárnica y mejora de la finura de la fibra o lana. Con respecto a los pastos, se ha logrado obtener un rendimiento promedio, por pastoreo, de 12 toneladas por hectárea. Con ello se asegura la alimentación para 630 ovinos.
Antamina informó que reafirmad su compromiso con el desarrollo de las comunidades vecinas y apuesta por la continuidad de sus programas de enfoque social. Ello pese a las dificultades del estado de emergencia, contribuyendo para que las prácticas productivas de sus grupos de interés cumplan los estándares de la nueva convivencia social.