Este jueves 24 de noviembre se cumplen 28 años del asesinato del periodista Hugo Bustíos Saavedra, quien fuera asesinado en 1988 por miembros del Ejército en Huanta, Ayacucho. El crimen es uno de los casos más emblemáticos de la época de la violencia por su execrable crueldad (su cuerpo fue destrozado con un explosivo) y de los tantos que transgredieron la libertad de expresión de los periodistas en nuestro país.
Como se recuerda, recién el 2008 fueron condenados dos de los autores del asesinato del corresponsal de Caretas: el entonces comandante de la Base Contrasubversiva de Castropampa, Víctor La Vera Hernández (Javier Landa Dupont), y el entonces capitán Amador Vidal Sanbento (Ojos de Gato). La justicia recién llegaba para la viuda de Bustíos, Margarita Patiño Rey Sánchez, quien durante todos esos años tuvo que resistir la indolencia del Estado y la impunidad de este crimen. En 1997, la CIDH concluyó que el Perú no respetó el debido proceso en las investigaciones del asesinato del periodista, por lo que recomendó al Estado desarrollar una investigación “seria, imparcial y eficaz”. Posteriormente, un acuerdo entre este ente interamericano y el Perú, en el 2001, posibilitó el inicio de una nueva etapa del caso, que concluyó con la condena de La Vera y de Vidal.
Pero la Sala Penal Nacional estableció en su sentencia del 2008 que ellos no habían sido los únicos autores del asesinato de Bustíos, por lo que ordenó al Ministerio Público continuar con las investigaciones. Ese mismo año, Amador Vidal Sanbento reveló los nombres de otros militares que participaron en el crimen: Johnny Zapata Acuña (Centurión) y Daniel Urresti Elera (Arturo).
El 2015, un juez penal de Ayacucho remitió acusación en contra de Urresti a la Sala Penal Nacional de Lima. Paralelamente, fue nombrado ministro del Interior por el gobierno de Ollanta Humala. Margarita Patiño inicio una nueva fase de su larga lucha, en donde tuvo que enfrentar también el enorme poder mediático de este ministro respaldado por el presidente de la República.
Meses después, Urresti Elera fue cesado de sus funciones, pero automáticamente se convirtió en el candidato del partido de gobierno para las elecciones presidenciales, a pesar que el juicio oral por el crimen de lesa humanidad que se le imputa comenzó en julio del 2015. Margarita Patiño advirtió ánimo de impunidad en esta nueva posición de Urresti, pues también sobre él pesaba la acusación de la testigo presencial Ysabel Rodríguez Chipana, quien no sólo lo incriminó delante de los jueces de haber participado en el asesinato de Bustíos, sino también de haberla violado sexualmente en dos ocasiones para que silenciara lo que vio aquel 24 de noviembre de 1988.
Culminada la frustrada candidatura de Urresti, el proceso judicial continuó con situaciones que afectaron a Patiño, como el repentino cambio del entonces presidente del tribunal a cargo del proceso, el vocal Marco Cerna Bazán. El jueves 27 de octubre pasado, Margarita Patiño murió a los 64 años en un accidente de carretera en Huancavelica, sin haber hallado justicia ni la verdad de por qué asesinaron a su esposo.