Huánuco: Pobladores construyen carretera para impulsar el turismo en Huamalíes

HUAMALÍES. Mediante faenas comunales comuneros del centro poblado de Coyllarbamba, distrito de Tantamayo, provincia de Humalies, ya ejecutaron más de la mitad de una vía de 22 km que dirige a la laguna de 24 islotes, reportó el diario «El Siglo». Ellos decidieron realizar los trabajos para el desarrollo del turismo local ante el incumplimiento de promesas electorales hechas por los políticos.

Los coyllarbambinos tienen la esperanza que esta actividad económica será el motor de su desarrollo, por lo que tras juntar colaboraciones de víveres y herramientas, más de una centena de comuneros construyen una carretera de aproximadamente 22 kilómetros, que va desde esta localidad hasta la laguna Tecllo, que tiene como principal atractivo alrededor de 24 islotes naturales, donde se crían aves migradoras de distintas especies, además de contar con una zona arqueológica denominada Puñospa Marca y otro lago, Jaracocha.

El presidente de la comunidad campesina, Roger Ramírez Mallqui, y el alcalde del centro poblado, Nincol Aponte Sudario, dijeron que se cansaron de las promesas políticas de construir las carreteras que impulsarán el turismo y actividades productivas, por lo que, tras la propuesta de Ramírez de abrir la trocha carrozable a pulso, su comunidad le respaldó. Primero, dice él, intentó gestionar la vía mediante inversión pública, llegando a informarse que se tenía que desarrollar un trámite largo y burocrático desde la elaboración del perfil y finalmente la licitación de la obra, que tomaría muchos años, igual como esperar las promesas de los candidatos.

Ya el año pasado, ante la iniciativa de una familia que abría la carretera para hacer llegar solo hasta su casa, los habitantes del caserío de Shucsha, decidieron unirse para que construyan siete kilómetros de la vía, permitiendo el acceso de materiales para la empresa que ejecutaba una obra de saneamiento básico en la zona, a cambio recibieron víveres de la constructora para las faenas. Con esa experiencia, decidieron continuar la apertura con dirección a Tecllo, que tiene una longitud de 22 kilómetros desde Coyllarbamba, sin ningún trazo ni plano profesional de algún ingeniero, solo guiados por la intuición, informó el diario «El Siglo»