LLATA. El día de hoy, Llata celebra su ascensión de villa a ciudad. Se trata de una celebración que une a la población llatina y en la que se reconoce como heredera de una gran riqueza cultural, como capital folklórica de la región Huánuco. En los últimos días, autoridades y población de la capital de la provincia huanuqueña de Huamalíes iniciaron las actividades para recordar esta fecha.
El 31 de octubre de 1891 la villa de Llata, en la región Huánuco, fue elevada a la categoría de ciudad durante la gestión del, por entonces, presidente de la República, Remigio Morales Bermúdez. Es así que cada 31 de octubre, la población llatina celebra esta importante fecha. A nivel de la provincia de Huamalíes, solo Llata comparte ese estatus con la ciudad de Puños, ubicada al noroeste de la capital huamaliana.
Se sabe que todas las investigaciones realizadas no pueden ubicar una fecha en la que se produjo el nacimiento o la fundación de la localidad de Llata. Se tiene entendido que cuando llegaron los españoles al Imperio Incaico, Llata se encontraba asentada en un paraje cercano a lo que es la actual ciudad. Fue en 1569 en que Llata empezó ocupar el emplazamiento que hoy se le conoce para ser cabeza de un corregimiento.
Llata tiene un enorme potencial turístico, pues es conocida como la capital folklórica de la región Huánuco. Sin embargo, hay mucho por hacer para impulsar el desarrollo llatino, y así alcanzar la importancia que dentro de la región tienen ciudades como Tingo María o la misma ciudad de Huánuco. Actualmente, las fuerzas laborales que mueven la economía del distrito de Llata son más que nada la agricultura y la ganadería. En cuanto a la ciudad en sí, son las actividades ligadas al comercio y al transporte las que tienen mayor predominancia.