Huanta y Huamanga marcharon masivamente a favor de la paz y contra el narcotráfico y el terrorismo

Miles de colegiales, estudiantes, ciudadanos y autoridades civiles y policiales de Huanta y de Huamanga, participaron hoy de contundentes manifestaciones contra la violencia y el terror por las principales calles de la ciudad, al conmemorarse  el quinto día del asesinato de la policía antidrogas huantina Maricel Solier.


 


Organizada por autoridades locales y por la Policía Nacional del Perú, la Marcha por la Paz en Huanta contó con la participación de 2.500 colegiales de primaria y secundaria, tanto de colegios públicos como privados. 


 


No a la violencia


 


Estudiantes y  ciudadanos salieron a las calles portando pancartas y cartelones para exigir paz y respeto a la vida en la provincia de Huanta, así como para rechazar la presencia del narcotráfico y del terrorismo en la zona, tras la emboscada que sufriera una patrulla policial en las afueras de Huamanga, hecho que dejó como saldo la muerte de la suboficial PNP Maricel Solier Gavilán. 


 


Frases como “Basta de sangre, basta de muerte, queremos vivir en paz” se leían en los carteles confeccionados por niños y jóvenes, quienes junto con sus maestros recorrieron las calles y jirones de la ciudad, acompañados por una banda de música que interpretaba marchas e himnos. 


 


Los transeúntes aplaudían el paso de la gente y los vecinos salían de sus casas para pedir a voz en cuello que llegue la paz a Ayacucho y a todo el país. 


 


A la movilización acudieron autoridades como el teniente alcalde de Huanta, Hugo Pino Villanueva, el gobernador provincial Vladimir Montero y el comandante PNP José Edgar Olivares Gonzáles, propulsor de la manifestación a favor de la paz.


 


También participaron efectivos policiales del Destacamento de Operaciones Tácticas Antidrogas, DEPOTAD, de Huamanga, junto al director de la sub-región de Huanta, trabajadores de COFOPRI, personal de la Unidad de Gestión Educativa Local, trabajadores del municipio de Huanta y miembros de la Cooperativa Santa María Magdalena. 


 


Misa en Huamanga


Mientras tanto, en Huamanga, mandos policiales, autoridades locales, familiares y compañeros de armas participaron en una emotiva misa en el quinto día de la muerte de la suboficial Solier, que se llevó a cabo en la Basílica Catedral de Ayacucho, en la Plaza Mayor de esa ciudad


 


Asistieron autoridades como el general PNP Oswaldo Hurtado Cáceres, jefe de la IX DIRTEPOL de Ayacucho, y el Fiscal Decano del Distrito Judicial de Ayacucho, Javier Gonzáles, el gobernador de Ayacucho, Eduardo Morales Gálvez, y todos los  alcaldes distritales.


 


Culminada la ceremonia litúrgica, autoridades y representantes de juntas vecinales, estudiantes de academias pre-policiales y cadetes de la Escuela Técnica Superior de la PNP participaron en una Marcha por la Paz que fue encabezada por altos mandos policiales.


 


Acompañados por los familiares de la asesinada policía antidrogas, recorrieron la ciudad con pancartas que llevaban mensajes como: “Es hora de vivir en paz, basta de sangre y muertes, queremos vivir en paz”.


 


“Creo que ya es hora que todos reaccionemos y cerremos la puerta al horror, para buscar la paz y defenderla. La participación de las autoridades en la marcha demuestra que hay conciencia del problema”, indicó el general PNP Hurtado Cáceres. Acto seguido, sostuvo que se han intensificado las investigaciones sobre la emboscada y precisó que se encontraba en Huamanga un equipo especial para capturar a los asesinos. 


 


Durante la Marcha por la Paz, Guillermina Gavilán Mendoza, abuela de Maricel Solier Gavilán, estalló en llanto y se abrazó con las compañeras de promoción de su desaparecida nieta, para luego desvanecerse por algunos segundos, siendo reanimada inmediatamente por un grupo de policías.


 


La movilización fue escoltada por unidades vehiculares de la PNP y de la unidad motorizada del Serenazgo del municipio de Huamanga, cuyos conductores encendieron en todo momento las sirenas en señal de duelo.