Más de 400,500 toneladas de emisiones de dióxido de carbono, CO2, ha logrado reducir desde el 2002 la central hidroeléctrica chilena de Chacabuquito, de la empresa Colbún, mediante la venta de reducciones de emisiones certificadas de gases de efecto invernadero, conocidas como bonos de carbono.
Según impulsaron voceros de la mencionada compañía, estos bonos, impulsados por el Banco Mundial y establecidos en el Protocolo de Kioto, permiten a las naciones industrializadas y empresas comprar parte de las reducciones de gases de efecto invernadero a compañías de países en desarrollo.