Un vínculo más con el narcotráfico. Aldo Carhuallanqui Porras, hermano de Adolfo Carhuallanqui Porras o César Cataño Porras, propietario de la empresa aérea “Peruvian Airlines”, también tiene antecedentes policiales por narcotráfico.
Según un informe del diario La República, el 1 de febrero de 1983, la dependencia de la Policía de Investigaciones del Perú (PIP), en el distrito de La Victoria, recibió información confidencial sobre una vivienda en la que se vendía droga.
Tras la información recibida, un equipo dirigido por el capitán PIP Jaime Salazar Bolívar intervino la vivienda ubicada en la calle Enrique de Barreda 185 en la urbanización Apolo. En el interior del inmueble, los detectives hallaron 3 kilos y medio de pasta básica de cocaína.
La vivienda pertenecía a Hilda Porras Palomino y el hombre que se ocultó al observar a los detectives de la PIP era su sobrino Aldo Carhuallanqui Porras, hermanos de Adolfo Carhuallanqui o César Cataño. Ambas personas fueron detenidas
De acuerdo con el atestado, Aldo Carhuallanqui aceptó la posesión de la droga. Pero aclaró que le pertenecía a un sujeto que identificó como Willy Ramírez. Esta versión no convenció a la Policía y lo denunció a él y a su tía Hilda Porras por tráfico ilícito de drogas y resistencia a la autoridad. En el caso de Hilda Porras, la policía la acusó porque se identificó primero con el nombre falso de Gilda Mendoza Paucarchuco.
Aldo Carhuallanqui Porras reaparecería varios años después como gerente de las empresas de su hermano César Cataño Porras, en particular las que han sido señaladas por el Equipo Especial de Investigación (EEI), de la Dirección Antidrogas (Dirandro), como parte de un esquema de presunto lavado de activos de origen ilegítimo.
En 1995, Aldo Carhuallanqui fue designado gerente general de “Importaciones Exportaciones Bryan Cataño”. Y en 2001 ocupó la misma posición en la firma “Import Export Vizcar”. Ambas compañías son de propiedad de César Cataño.
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