Para el analista en temas de narcotráfico Rubén Vargas, el combate contra el tráfico ilícito de drogas en nuestro país fue uno de las grandes temas ausentes en el discurso que por 28 de julio brindó el presidente Alan García en el Congreso de la República, lo que es preocupante pues «en el campo de la seguridad interna [el narcotráfico] es un problema que va creciendo día a día frente a la inoperancia, la pasividad y la reticencia con que lo ha tomado el actual gobierno».
«La lucha contra el narcotráfico fue uno de los grandes ausentes en el mensaje presidencial y ese es un gravísimo error porque el narcotráfico en el Perú está comenzando a tener una forma muy peligrosa, la hoja de coca sigue creciendo, está expandiéndose y sin ninguna duda que en el 2011 vamos a terminar siendo el primer productor de este cultivo. Seguramente que las secuelas de ser el primer productor de este producto se van a ir presentando con el correr de los meses», opinó.
Por ello, dijo en el programa radial Diálogo Ciudadano -que emite INFOREGIÓN los fines de semana- que, durante el periodo de doce meses que le queda al presidente Alan García en el poder, no se debe dejar el ‘piloto automático’ en el país un tema tan importante como el combate contra el crimen organizado dedicado al tráfico ilegal de estupefacientes.
«En este período de transición, y básicamente electoral, lo que el Gobierno va a intentar hacer es tapar los problemas recurrentes y estructurales del país y las grandes amenazas como el narcotráfico y el terrorismo. Van a tratar de generar cortinas de humo para distraer la atención de los principales problemas del país y, en algunos casos de la gestión, seguramente que se pondrá el ‘piloto automático’ y se realizarán las cosas como se han venido haciendo en los últimos años», indicó.
Situación inmanejable
No obstante, aclaró que «si seguimos sin hacer nada o haciendo poco en el tema del narcotráfico, eso favorecerá a la actividad del crimen organizado, al crecimiento de la coca y [hará] cada vez más difícil enfrentar el delicado problema». «Si algo favorece al narcotráfico es precisamente dejar al país en piloto automático para que este terrible problema siga creciendo de manera subterránea», estimó.
Sostuvo que, de no tomarse medidas para combatir la actividad de los traficantes de drogas, cuando nos demos cuenta vamos a estar ante una situación inmanejable, de la que no se va a poder regresar a situaciones más manejables, por lo que recomendó cambiar la actual posición de pasividad del Gobierno e intentar ganar todo el tiempo perdido, pues de lo contrario «estamos camino al despeñadero y de ahí nadie nos va a sacar».
El experto señaló, finalmente, que hubiera sido adecuado escuchar del presidente Alan García durante su mensaje a la nacion de fiestas patrias que se priorizaría en el Vrae el trabajo de la Policía Antidrogas con más recursos y más logística, así como también que se ampliarían las labores de erradicación e interdicción a otras zonas del país, como el Putumayo, Pichis Palcazu, Madre de Dios y San Gabán, donde -dijo- la hoja de coca está creciendo sin ningún control.
Del mismo modo, detalló que le hubiese gustado escuchar que el Estado apoyaría más y se comprometería con impulsar el desarrollo alternativo en Aguaytía (Ucayali), donde hay muchas iniciativas de privados para productos lícitos como el cacao, la palma aceitera y algunos productos tropicales.
«Nada de eso ha ocurrido y definitivamente eso nos hace pensar que esa estrategia de lucha antidrogas que fue aprobada por este Gobierno en el 2006 ha sido un saludo a la bandera y ha sido parte de la demagogia y de la irresponsabilidad con la que este Gobierno ha tratado el tema de las drogas», precisó.