«Gobierno nuevamente cometió el error de no explicar al país de qué se trataba el problema antes del conflicto»

El ex ministro del interior Fernando Rospigliosi consideró que en el caso de la huelga de los mineros informales de Madre de Dios y Arequipa, que dejó un saldo mortal de seis víctimas, el Gobierno nuevamente cometió el error de no explicar al país de qué se trataba el problema antes de que se produjera el conflicto, en este caso la situación de la minería informal que contamina el ambiente, depreda y no paga impuestos.

«Parece que el Gobierno no aprende de sus errores, porque en esta huelga hemos visto la reiteración de todos los errores anteriores. Nuevamente se cometió el error de no explicar al país de qué se trataba el problema, no hubo ningún trabajo político del Gobierno previo al conflicto, las explicaciones vinieron después», comentó en entrevista con el programa Diálogo Ciudadano que emite INFOREGIÓN los fines de semana.

Rospigliosi Capurro dijo, no obstante, que en este caso el Gobierno tenía razón al tratar de ordenar la actividad minera informal que «no es pequeña minería, sino una minería grande, depredadora, que contamina el ambiente y no paga impuestos».

Dijo, en esa línea, que es acertado que el Gobierno formalice la minería ilegal, pero lo malo es que lo haya hecho sin explicar previamente al país de qué se trataba el asunto. «Cuando se ha producido el conflicto y el bloqueo de carreteras, han entrado irresponsablemente con un saldo de seis víctimas fatales», señaló.

Recordó que la Policía tiene entrenamiento y que es posible adquirir armas no letales que permitan enfrentar este tipo de conflictos.

«Hay muertos y después el Gobierno empieza a retroceder, ya ha ofrecido modificar el decreto que dio origen al problema, entonces estamos nuevamente en lo mismo, como ocurrió en Bagua, en Moquegua y en muchos otros lugares», rememoró.

Explicó que el Ejecutivo actúa sin medir las consecuencias y da los decretos sin evaluar cuál va a ser la respuesta de los sectores que se sienten afectados, pues no tiene ningún manejo de ese tipo de situaciones.

«Lo lógico después de tantas malas experiencias sería evaluar cuál va a ser la respuesta, evaluar si vale la pena hacerlo en este momento, y si están decididos a hacerlo empezar con una explicación y no que la explicación venga después de los muertos», reiteró.