El primer día de la anunciada huelga indefinida de los cocaleros de Aucayacu, resultó un total fracaso pues las actividades en la ciudad y alrededores se desarrollaron con total normalidad y no se registró disturbios, bloqueos ni movilizaciones.
La medida, adoptada por un sector de las organizaciones cocaleras de la zona, busca evitar la erradicación de coca ilegal en el Alto Huallaga, el mayor productor de hoja de coca que se deriva en su gran mayoría hacia el narcotráfico.
Desde tempranas horas del día se observó que las actividades de todos los sectores en Aucayacu y en las zonas aledañas, se desarrollaron de manera normal y sólo se notó la presencia de un pequeño grupo de agricultores cocaleros que acudieron a la convocatoria en el cruce de Sangapilla alrededor del mediodía.
No se registraron bloqueos, manifestaciones, disturbios ni marchas por la ciudad. Se observó sí, un incremento del patrullaje policial en previsión de desordenes y en resguardo de la seguridad de la población.
El Patrullaje se realizó en grupos de a pie por la ciudad y en unidades motorizadas para resguardar las salidas hacia Tocache, Tingo María y Aguaytía.
El transporte público e interprovincial se desarrolló también con total normalidad. Ni siquiera hubo incremento de pasajes como suelen aprovechar los transportistas en estas ocasiones.
El mercado de abastos abrió como todos los días. Los comerciantes y las amas de casa hablaron en un solo lenguaje. Todos atribuyeron el fracaso del paro a la falta de credibilidad de los dirigentes cocaleros, a quienes señalaron como personas que se aprovechan del movimiento cocalero para alcanzar objetivos políticos personales.
Ello sumado a los vergonzosos hechos que en los últimos meses han protagonizado dirigentes cocaleros involucrados en hechos de sangre o apresados por narcotráfico, ha contribuido sin duda en el enorme desprestigio que tienen entre sus bases y en la población.
Muchas amas de casa se pronunciaron además por dejar atrás la violencia para lograr por fin el despegue y el desarrollo de la zona.
Frente a este fracaso, los dirigentes de la Federación de Productores Agropecuarios, Cocaleros y Forestales de José Crespo y Castillo, y otras organizaciones convocantes, prefirieron mantener un perfil bajo y evitaron dar la cara en todo el día.
Recién en horas de la tarde, algunos dirigentes como Martín Mayorca, intentaron justificar el fracaso de la jornada y anunciaron que se replanteará la paralización para reiniciarla el próximo lunes, a fin de hacerla coincidir con la paralización que alientan diversas organizaciones a nivel nacional, para los días 7, 8 y 9 de julio.