En lo que se ha constituido en una de las apuestas más fuertes del gobierno por dar con el paradero y capturar a los mandos terroristas de Sendero Luminoso, representantes de los ministerios del Interior y de Defensa, de la Policía Nacional del Perú, del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y de la Presidencia del Consejo de Ministros se reunieron el pasado miércoles 14 de octubre para dar los puntos finales al Sistema de Beneficio de Recompensas.
Así, tras esta cita, se decidió que el gobierno peruano pagará S/. 1 millón a quien brinde información «veraz y oportuna» que permita capturar al mando terrorista del valle de los ríos Apurimac y Ene, VRAE, Víctor Quispe Palomino, camarada ‘José’.
Según información que recoge el diario El Comercio, revelar el paradero de los mandos logísticos de ‘José’ también es un negocio rentable, pues las recompensas por delatar a Jorge Quispe Palomino (‘Raúl’ o ‘Marino’) y a Leonardo Huamaní Loayza (‘Alipio’ o ‘Moisés’) son de S/.500 mil por cada uno de estos subversivos.
Todos son considerados como los principales responsables de las bajas que el Ejército Peruano sufre de tanto en tanto en el VRAE.
El precio de los terroristas en el Huallaga
En el caso de los mandos senderistas en el Huallaga, quien informe sobre el paradero de José Flores León, camarada ‘Artemio’ recibirá, al igual que en el caso de ‘José’, S/. 1 millón de nuevos soles.
Sus hombres más cercanos también tienen un precio. La recompensa por “Rubén” (cuyo nombre no se conoce aún), Yoli Tolentino Condezo (“Walter”) y Édgar Nicanor Mejía Ascencio (“Michael” o “Izula”) es de S/.500 mil por cada uno. Todo es cuestión de tiempo, y de dinero.
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