La experiencia de los productores plataneros del distrito cusqueño de Pichari debe replicarse en otras localidades del valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, sostuvo el gerente de Desarrollo Rural y Económico del mencionado distrito, Andrés Chinchay, quien con optimismo manifestó que los plátanos de Pichari van camino a convertirse en los mejores de la región y del mundo.
En Diálogo Ambiental de INFOREGIÓN, precisó que pese a que la infraestructura con la que cuentan los plataneros de Pichari no es la mejor, debido a que la carretera que los une con Huamanga es sólo afirmada y los costos de transporte se hacen muy caros, han logrado que sus productos ingresen a dos supermercados de Lima.
Indicó que actualmente en Pichari existen 380 hectáreas que producen plátano, cada una de ellas entrega entre 10 y 15 toneladas por año. “Estamos invirtiendo en capacitación, difusión y otros conceptos, además se proyecta llegar a 700 hectáreas con cultivos de plátano en Pichari”, agregó.
En otro momento, Chinchay destacó que los plátanos que se producen en Pichari son orgánicos y también variados, ya que cultivan hasta cinco especies. “Además del plátano de seda, que se conoce como banano, tenemos plátano de la isla, el bizcochito, el plátano para cocinar, y el plátano morado”, manifestó.
Señaló que otra de las dificultades que afrontan los productores bananeros ecuatorianos es su forma de producción convencional.
“La producción ecuatoriana está caracterizada por el uso de grandes cantidades de agroquímicos. Incluso se realizan de 25 a 30 aplicaciones de pesticidas al año. Esta situación está generando la disminución de la demanda internacional pues la tendencia en todo el mundo es consumir productos orgánicos”, subrayó.
Afirmó que actualmente en el VRAE se está promoviendo la comercialización de los bananos orgánicos a un precio justo.
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