Se debe exigir un mayor compromiso de las autoridades para poder generar políticas claras y preventivas orientadas a proteger a niños y adolescentes a fin de frenar todo tipo de violencia y condenar el uso de niños en el que incurren el narcotráfico y el grupo terrorista Sendero Luminoso, señaló Nancy Gálvez, representante de Wawacunamanta, organización defensora de los niños y los adolescentes.
Gálvez Morote lamentó que pese a la confirmación de la existencia de trata de personas en algunos distritos del valle de los ríos Apurímac y Ene,VRAE, particularmente en la modalidad de explotación laboral y sexual, las autoridades no se han pronunciado sobre este problema, y hasta el momento muchas niñas de humildes hogares siguen siendo utilizadas por mafias que operan en la zona.
“Todos, autoridades y sociedad civil, debemos repudiar estos lamentables casos, porque no se puede admitir que los niños sigan siendo usados en diversas actividades ilícitas en las que permanentemente ponen en riesgo sus vidas. Hay tratados internacionales de los cuales forma parte el Perú, pero parece que a nuestras autoridades poco o nada les importa”, expresó.
Avances y retos
En otro momento, la representante de Wawacunamanta afirmó que, afortunadamente, hay instituciones que han comenzado a sensibilizarse y trabajan para implementar el Plan Regional de Lucha contra el Trabajo Infantil.
“Hoy es un día propicio, son 20 años de la Declaración de los Derechos del Niño y creo que ya es necesario que las autoridades y la sociedad civil analicen qué se ha hecho y qué falta hacer para reivindicar los derechos de los niños. Debemos articular propuestas e involucrar a autoridades y a los medios de comunicación”, enfatizó.