Un grupo de campesinos ex cocaleros de la comunidad huanuqueña de Huayhuantillo, que dejó atrás el cultivo de hoja de coca que alimentaba al narcotráfico para producir cacao de alta calidad en el Alto Huallaga, estará presente en la versión 2010 de la feria gastronómica Mistura que se realizará en Lima.
Jessica Rengifo Reátegui, una joven madre de 34 años con dos hijos de 8 y 17 años, respectivamente, recuerda que muy pocos confiaban en el cacao como alternativa, pero ella decidió arriesgar y luego de dos años de paciente cuidado, de sus frondosos árboles comenzaron a caer sus primeros frutos.
Ella estará la próxima semana en los stands 117 y 118 del Gran Bazar de la III Feria Gastronómica Internacional de Lima Mistura 2010 abriéndose paso entre los grandes expositores para sacar la cara por las otras beneficiarias del Programa Nacional Juntos que trabajan con ella el cacao.
Este es otro ejemplo de que en la comunidad de Huayhuantillo, en Huánuco, la economía de las beneficiarias del Programa Juntos crece de la mano con el cacao orgánico que producen en la zona.
Difícil camino
Pero el camino que ahora luce radiante y esperanzador no ha sido fácil. En el año 2005, las familias de esta comunidad que pertenece al distrito Daniel Alomía Robles en la provincia de Leoncio Prado, decidieron no cultivar más la hoja de coca.
Los inicios con otros cultivos fueron duros, hasta que en el 2006 el Programa Juntos llegó con la entrega del incentivo económico que al inicio eran 100 soles mensuales.
Con este incentivo, no solo aliviaron las necesidades básicas inmediatas, sino que muchas familias compraron plantas de cacao para iniciar una aventura que cuatro años después las pone en la mejor vitrina gastronómica que se puedan imaginar.
El esmero que Jessica le había puesto a sus cultivos había sido tal que no paso mucho tiempo para que su cacao fuera solicitado por las grandes acopiadores de Tingo María. Al ver el éxito de Jessica, decenas de beneficiarias de Huayhuantillo siguieron su camino y ahora también producen cacao.
Actualmente, son 26 las madres beneficiarias de Juntos que cultivan 15 hectáreas de cacao a base de abono orgánico. Su producción asciende a entre 30 y 50 kilos de cacao al mes. Por cada kilo de la semilla reciben S/. 6.80.
El valor y creatividad de Jessica ha ayudado a cambiar la vida de muchas familias de Huayhuantillo que hoy trabajan de manera coordinada. Incluso los esposos e hijos de las beneficiarias forman parte de este proyecto productivo, pues ellos también intervienen en el cultivo y cosecha del cacao.
Gracias a esta organización, las mujeres ahora han comenzado a procesar y transformar las semillas en dulce de cacao y a elaborar chocolate de taza, jalea de cacao y el cacao sour que son un deleite para el paladar de propios y extraños.