El Secretario de Estado Asistente para Asuntos Antinarcóticos de Estados Unidos, embajador William Brownfield, se comprometió ante el jefe del gabinete Salomón Lerner Ghittis, a respaldar la nueva política antidrogas del gobierno peruano, que preside Ollanta Humala Tasso.
Así lo anunció el propio Lerner Ghitis luego de reunirse en Washington D.C. con William Brownfield en el Departamento de Estado de Estados Unidos, con la asistencia del Embajadordel Perú en EEUU, Harold Forsyth y la Embajadora de dicho país en Perú, Rose Likins.
Indicó además que se precisó a Brownfield que el Plan Estratégico Antinarcóticos 2011-2016 del Perú estará concluido a fines de noviembre próximo.
“El presidente Ollanta Humala tiene el compromisomoral de combatir las amenazas contra la seguridad nacional. Nuestro gobierno está resuelto a eliminar la alianza nefasta que existe entre el narcotráfico y los remanentes senderistas del VRAE, pero es una lucha que requiere del pleno respaldo de la cooperación internacional”, expresó Lerner en la cita.
Impulsar acuerdos bilaterales
Lerner indicó que Brownfield escuchó atentamente la explicación sobre los planes gubernamentales peruanos que buscan reevaluar las políticas y estrategias antidrogas seguidas hasta ahora, tras lo cual el funcionario norteamericano señaló la necesidad de seguir impulsando acuerdos bilaterales entre los dos países en base al pleno respeto de la soberanía nacional peruana.
La máxima autoridad del Departamento de Estado de Estados Unidos en asuntos antinarcóticos precisó que EE.UU seguirá actuando como un socio confiable y comprometido en la lucha común contra el narcotráfico.
Lerner a su turno, expresó el compromiso del gobierno para propiciar el desmantelamiento de las organizaciones de narcotraficantes; incorporando la variable medioambiental al Plan Estratégico Antidrogas, tomando en cuenta los ríos afectados por los insumos químicos, la pérdida de suelos yla deforestación, a través de la consolidacióndel modelo peruano de “desarrollo alternativointegral sostenible e inclusivo”.
Según el primer ministro peruano, el nuevo plan antidrogas de Perú contempla la necesidad de actuar simultáneamente en varios frentes, emprendiendo políticas de estado y acciones coordinadas que permitan afianzar la presencia del estado en las regiones donde aún existe actividad del narcotráfico y de Sendero Luminoso.
Precisó que se llevará en simuláneo desarrollo e infraestructura vital, en combinación con la erradicación de cultivos ilegales, la interdicción, la sustituciónde cultivos, el control de los precursoresquímicos, y el combate frontal al lavado de dinero.
Posteriormente el premier se reunió con el llamado «Zar antidrogas» de Estados Unidos, Gil Kerlikowske, quien le expresó su amplia disposición de colaborar en el diseño e implementación de la nueva política antinarcóticos del país andino, que estará lista en noviembre.
Acompañado de funcionarios encargados de la política contra el tráfico ilícito de estupefacientes, Kerlikowske explicó el papel que desempeña su institución en el combate a las drogas y reiteró la posición de su gobierno de respaldo al nuevo planteamiento de lucha contra el tráfico de drogas del Perú.
Kerlikowske ofreció la participación de su institución en todas aquellas instancias que sea requerida, y especialmente en la formulación de políticas de prevención y tratamiento y la acumulación y procesamiento de información valiosa que permita el diseño y aplicación de estrategias exitosas en el combate contra el consumo y comercialización de las drogas.
El Zar Antidrogas se comprometió asimismo a participar en la próxima Reunión Regional Antidrogas que se llevará a cabo el próximo año en el Perú.
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