Como “muy alarmante” consideró Paolo Piñeiro, relator de la Niñez de la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos (OEA) la situación de los niños que trabajan en los lavaderos de oro informales de Madre de Dios.
“No hay ninguna presencia de servicios públicos de salud, educación,
seguridad. Es una informalidad en un ambiente extremamente conflictivo. La situación de la niñez es de inseguridad total, y en el caso de la adolescencia hay graves problemas de connotación sexual en bares y
restaurantes, realmente numerosos”, afirmó.
En entrevista con el programa Diálogo Ciudadano, especial de fin de semana, que se difunde en Madre de Dios vía Radio Aurora en coproducción con INFOREGIÓN, Agencia de Prensa Ambiental, el representante internacional dijo que ante esa situación debe realizarse una intervención de emergencia por parte de las autoridades regionales.
“Es importante que la sociedad civil de Madre de Dios pida un diálogo con las autoridades para que la situación de la niñez en esos asentamientos pueda recibir alguna respuesta para su tratamiento por parte del gobierno. Es una oportunidad única para que esa situación sea transformada”, recomendó Piñeiro.
El representante de la OEA, que realizó una inspección por la ruta de la
carretera Interoceánica, también demandó mayor interacción de los diversos ministerios para que pueda ayudarse a cambiar esa situación terrible que afecta a la niñez en esos asentamientos mineros.