Ocho sujetos encapuchados, al parecer delincuentes comunes, detuvieron siete vehículos en plena carretera entre las localidades de Santillana y Huanta para desvalijar a los pasajeros, sin que la Policía Nacional se diera por enterada.
El robo ocurrió en el paraje conocido como Pucaraccay, donde los facinerosos armaron un bloqueo de carreteras. Provistos de armas de fuego, la banda encañonó a los pasajeros, los bajaron de los vehículos y los obligaron a mantenerse tirados en el piso boca abajo mientras les arrebataban relojes, carteras, celulares, ropa, maletines, dinero en efectivo y otros objetos de valor.
Según las víctimas, que prefirieron no identificarse, los malhechores hablaban con acento de la zona, en términos de alta agresividad y con la tranquilidad de quien sabe que en la zona no existe la más mínima posibilidad de encontrarse con una patrulla policial, lo que generó gran indignación.