En Mazuco la selva ha muerto

El Comercio. Siete horas toma llegar del Cusco a Madre de Dios por la flamante carretera Interoceánica, siempre y cuando no llueva. Ya en plena selva, un letrero da la bienvenida a la Capital de la Biodiversidad del Perú y explica que estamos en zona de amortiguamiento del Parque Nacional Bahuaja Sonene, pero a pocos metros del cartel, se puede divisar pedazos de montañas carcomidas por la minería ilegal, y al lado de la vía, el río Inambari discurre enfermo, con ese color inconfundible con el que el enriquecimiento ilícito pinta el agua de los ríos de la selva: dorado oscuro.

El Inambari, el Colorado, el Tambopata y el Madre de Dios son los ríos del departamento que soportan en sus márgenes pueblos fundados por buscadores de oro y madereros informales entre los años 60 y 80.

Ahora, con el fácil acceso que da la carretera Interoceánica, la historia se repite y campamentos de palos y plásticos se multiplican en las márgenes de la nueva carretera, entre Mazuco y Puerto Maldonado. No somos los primeros en notar esto, ya que la ONG Conservación Internacional alerta sobre est0 en un informe.

Ese documento detalla que solo en la subcuenca del Inambari hay 372 concesiones mineras tituladas y 343 en trámite. Estas últimas cubren el 46% de la ribera. El primer pueblo de esa ruta es Mazuco, un puñado de casas y comercios.

Según Inocencio Aguilar —alcalde recientemente revocado de la provincia de Inambari— casi la totalidad de su población es migrante (además de nacionales, hay brasileños, chinos y coreanos) y el 20% no posee documento de identidad.

Allí la vida en el día es frenética cuando la gente se moviliza entre los locales de compra y venta de oro y los hospedajes. Además se ve camiones que van y vienen con la tolva siempre cubierta. Por la noche domina el desenfreno, pues hay cincuenta locales de diversión para un pueblo de 500 casas.

Aguilar, quien también se dedicó por años a la extracción de oro, dice que al menos en 15 de esos bares se prostituye a niñas traídas de Arequipa, Cusco y Puno. ¿Y por qué no los cierra? “Lo he intentado muchas veces”, responde y da a entender que por eso y fastidiar a sus vecinos para que se formalicen, lo acaban de revocar de su cargo.

La destrucción de cerca

Uno de los ex colegas y paisano de Aguilar es el cusqueño Boris Mellin. En Mazuco le dicen “El Gringo”, pero él es de Qosñipata. Su área de trabajo se encuentra a menos de una hora de Mazuco, a orillas de uno de los tributarios más contaminados del Inambari: el río Dos de Mayo.

Mellin se reclama minero artesanal, pero en su terreno trabajan frenéticamente al menos seis volquetes, tres tractores y una retrocarga.

Una discreta trocha asediada por la maleza parte de la carretera y conduce hasta su concesión. En el primer intento de ingresar, tuvimos que dar media vuelta.

La segunda vez, “El Gringo” dijo que no tenía nada que temer y tampoco nosotros. Recorrer a pie todas sus hectáreas sí puede ser un riesgo bajo el sol, una temperatura de 30 °C y mosquitos que habitan los pantanos que antes eran ramales del río. Allí, la selva es solo un recuerdo.

Claves
Chute. Así se llama al primer paso del lavado del oro, cuando los volquetes echan el material extraído del río sobre una rampa para ser disuelto por el agua.

Zaranda.Consiste en deslizar el material por una rampa larga de filtración llamada tolva.

Alfombras. Son las mallas que cubren la tolva y retienen el oro. Al final del lavado, se sacuden las alfombras para obtener el mineral, que luego será mezclado con mercurio. A esto se le llama clarificación.

Quemado. Es el proceso mediante el cual el oro es limpiado hasta que se vea amarillo brillante.

Datos

Tras una campaña emprendida por este Diario, el Ministerio del Ambiente inició una serie de acciones para detener la destrucción de la selva.

Dentro de las acciones destaca una mesa de diálogo entre autoridades y mineros informales. En su última sesión se ha acordado iniciar el registro de las dragas que hay en Madre de Dios.

Además se ha suspendido las autorizaciones para aquellas que se destinen a las explotaciones mineras en la zona.

Los comentarios están cerrados.