El presidente de Derecho, Ambiente y Recursos Naturales afirmó que en los últimos 10 años hemos perdido una superficie de bosques similar al tamaño de Tacna, es decir, unas 15 mil hectáreas. “Justo ahora que estamos celebrando que la Amazonía es una de las 7 maravillas de la naturaleza, es importante saber qué es lo que está pasando con esta maravilla”, señala Hugo Che Piu Deza, quien a lo largo de su conversación con el periodista Augusto Álvarez Rodrich insistirá en que el panorama amazónico no es muy alentador y que el acceso a la información es fundamental para sectores públicos y privados en su afán por el desarrollo en el sector forestal.
“Estamos perdiendo la Amazonía por la deforestación”, sigue Che Piu y la afirmación se sustenta con el lamentable dato de que en los últimos 10 años hemos perdido una superficie de bosques similar al tamaño de Tacna: unas 15 000 hectáreas aproximadamente.
La causa no es más que la humana en sus acciones legales e ilegales: entre las últimas se encuentran la minería ilegal con un creciente desarrollo en la Madre de Dios y que ha destruido una gran cantidad de bosques y también los cultivos ilícitos destinados al narcotráfico. Pero también hay deforestación legal, según el presidente de DAR: “se está promoviendo el tema con fines ambientales de los biocombustibles y cuando esto ocurre sobre plantaciones para biocombustibles, sobre áreas ya antiguamente deforestadas, no hay ningún problema, es darle un uso económico a un área que se ha perdido, pero cuando lo hacemos sobre bosques naturales lo que estamos haciendo es destruir nuestra Amazonía”, comentó.
Para esto, según expone, es importante el ordenamiento de los bosques: “saber que hay bosques con capacidad de uso agrícola, que están sobre tierras que podrían tener un uso agrícola, pero la mayor cantidad de bosques no tiene capacidad de uso agrícola y el no conocer bien eso hace que planifiquemos mal nuestro desarrollo, que fomentemos agricultura donde no va a ser viable”.
Además pide asignar derechos claros, no necesariamente de propiedad sino de uso. Y lo hecho por el gobierno peruano pone en tela de juicio la buena ejecución de los recursos forestales. “Los bosques en el Perú se entregan para aprovechamiento a través de concesiones forestales. Pero la falta de condiciones adecuadas, genera por ejemplo lo que pasó en Huánuco, que por el motivo del narcotráfico y el terrorismo casi han fracasado las concesiones. Es decir, los usos legales y sostenibles también fracasan por la falta de hacer frente de manera adecuada al narcotráfico.
Señaló que esta mala planificación es producto de la falta de información que, de mejorarse, ayudaría al sector público y privado a invertir mejor en las zonas forestales, pero también a la población a ser más participe del desarrollo.
“Nosotros monitoreamos el cumplimiento de la legislación sobre transparencia forestal en el sector, porque pensamos que si tenemos mejor transparencia va a haber información responsable y una gestión efectiva. Y eso disminuye corrupción y conflictos, incrementa la rendición de cuentas y genera un todo un círculo virtuoso”, finalizó.
DAR viene ejecutando el proyecto “Promoviendo la transparencia en el sector forestal”, que tuvo hace unos días su primera actividad de este año, el Foro Nacional Forestal. La siguiente actividad planificada es el festival por la Transparencia Forestal, que se realizará en la Universidad Nacional Agraria La Molina, el martes 18 de setiembre de 5 a 10 de la noche.