Tras anunciar la declaratoria de emergencia ambiental en la zona afectada por un aniego debido a la rotura de una tubería de desagüe en San Juan de Lurigancho (SJL), la ministra del Ambiente, Fabiola Muñoz, explicó que se tomó esta medida para priorizar el levantamiento de residuos sólidos y no agravar la situación que afecta a más de dos mil vecinos.
Además, señaló que se declaró la emergencia ambiental, luego de comprobarse que en el distrito no existía un plan de contingencia para hacer frente a las consecuencias ambientales del siniestro ocurrido.
“Estamos trabajando en equipo y coordinadamente con el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Salud, las autoridades locales y otras entidades del Estado a quienes nos corresponde actuar ante esta situación, junto a Sedapal, para atender por completo la emergencia. Las actividades de limpieza pública que ya se están empezando a realizar incluirán el manejo y gestión integral de los residuos sólidos”, dijo, tras repartir guantes a los vecinos de las viviendas afectadas, a fin de evitar problemas de salud.
Cabe precisar que la Resolución Ministerial N° 008-2019-MINAM señala que, durante los 45 días que durará la medida, se garantizará el manejo sostenible de la zona afectada, realizando los correspondientes trabajos de recuperación y remediación para mitigar la contaminación ambiental, a fin de proteger la salud de la población.
Según la norma publicada hoy en el diario oficial El Peruano, la declaratoria ambiental incluye a toda la zona afectada por la rotura del colector primario de desagüe ubicado en el cruce de la avenida Tusílagos con la avenida Próceres de la Independencia, en el distrito de SJL.
La norma ordena aprobar el Plan de Acción Inmediato y de Corto Plazo para la atención de la emergencia ambiental en el área geográfica descrita en la mencionada Resolución Ministerial. La ejecución del Plan de Acción Inmediato y de Corto Plazo está a cargo de las entidades públicas involucradas con su cumplimiento, en coordinación con la Municipalidad Metropolitana de Lima.
Entre los criterios que motivaron la declaratoria de emergencia ambiental están el alto riesgo a la salud de la ciudadanía, tales como enfermedades a la piel, conjuntivitis, infecciones diarreicas, hepatitis, según lo expresado por el Ministerio de Salud; y la presencia de aguas residuales domésticas e industriales, siendo que estas últimas pueden contener sustancias tóxicas y metales pesados.