«El proceso no es fácil, pero más socios castañeros se van uniendo al proyecto»

MADRE DE DIOS. Los días lunes 25 y martes 26 de julio del presente año, el Proyecto REDD+ Castañeros procedió a la entrega del primer adelanto de beneficios económicos a los socios castañeros en virtud a la labor de conservación de sus bosques de castaña.

El motivo de la entrega de este bono está vinculado a la cosecha realizada entre los años 2013 al 2016, comenta William Moreno, coordinador del proyecto, quien conversó con INFOREGIÓN para brindarnos más detalles sobre esta iniciativa que se realiza en la Amazonía peruana.

«Lo cultivado desde los años 2013 al 2016 fue vendido en el año 2020 y todo el 2021. Este reparto de utilidades ha sido en función de un convenio establecido entre Bosques Amazónicos y los concesionarios castañeros», precisa Moreno.

Recordemos que en el 2006, la construcción de la carretera Interoceánica que une al Perú con Brasil generó una gran amenaza de deforestación sobre las selvas de Madre de Dios, una de las zonas más biodiversas del planeta, sobre todo en los bosques de castaña asignados a pequeños concesionarios locales. Según las proyecciones, la facilidad de acceso que dará la nueva carretera ocasionará la deforestación del 34% de los bosques naturales de la zona para el 2041.

Ante esta preocupante perspectiva es que unas 405 familias de socios castañeros forman parte del proyecto REDD+ Castañeros que busca la protección de estas áreas verdes amenazadas por la creciente deforestación en esta región amazónica del país.

Es así como recién hace dos años estas personas lograron vender sus créditos de carbono. La razón de ello es la verificación de esas cosechas de castaña. Al respecto, Moreno sostiene que «los créditos son generados por las toneladas de carbono, por los gases de efecto invernadero que se han evitado generar hacia el ambiente gracias al Proyecto REDD+».

Esta iniciativa solo está focalizada en la región Madre de Dios. Se implementa con la ayuda del proyecto Bosques Amazónicos y los concesionarios castañeros, junto con el proyecto REDD+, quienes dan asesoramiento técnico, legal, monitoreo y otros servicios, los que están a la espera de que más socios puedan unirse.
Los bosques castañeros se ven amenazados por la deforestación.

El objetivo de este proyecto es evitar la deforestación de 300 000 hectáreas de bosques de castaña en Madre de Dios y mejorar las condiciones de vida de las más de 400 familias concesionarias. «Este proceso dura más o menos dos años, no es fácil, pero se van uniendo más socios castañeros. Ellos pasan por un proceso de evaluación y después existe un proceso de incorporación para ser parte del proyecto», afirma Moreno.

Finalmente, quienes han recibido estos beneficios económicos están comprometidos a seguir trabajando en unidad para desarrollar las buenas prácticas de conservación de sus concesiones de castaña; además de poder comercializarlas en los mercados locales del país.

Estas iniciativas son muy importantes para la conservación y la comunidad de castañeros de Madre de Dios. Los bosques no solo le dan vida a los seres humanos, sino que además su gestión sostenible genera desarrollo a las poblaciones locales y recursos que impulsen el desarrollo del país entero.