Durante los diez años de existencia que el Programa de pequeñas donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) tiene en el Perú, ha financiado más de 120 proyectos comunales dedicados al uso sostenible de los recursos naturales y conservación ambiental, por un monto de seis millones de dólares.
Jorge Chediek, representante del PNUD en nuestro país, indicó que dicho programa continuará en nuestro país por lo menos tres años más y que hay un millón y medio de dólares disponibles para diferentes concursos que se van hacer, algunos en las zonas urbanas otros para zonas rurales, así como en la zona afectada por el terremoto del año pasado.
Los programas o proyectos apoyados han sido muy exitosos y uno de ellos ganó este año el Premio Ecuatorial. Se trata del proyecto de algodón nativo de colores de Mórrope en Lambayeque, el cual demostró cómo el trabajo comunitario y la recuperación del patrimonio genético se pueden convertir en un instrumento de desarrollo.
Igualmente, resaltó que el Perú es un país megadiverso que tiene la oportunidad de convertir sus recursos en un instrumento de desarrollo con la participación de las propias comunidades.
Por otro lado, el ministro del Ambiente, Antonio Brack, destacó la ejecución de los proyectos comunales dedicados al uso sostenible de los recursos naturales y conservación del ambiente, apoyados por este programa. Igualmente, saludó la contribución de dinero de empresas como la Fundación Atocongo de Cementos Lima para dicho fin.
Ambas autoridades participaron en la inauguración de la Quinta Feria de Proyectos Ambientales que se realizará hasta el 26 de octubre en el Parque de La Familia del distrito limeño de San Borja y en donde se exponen alrededor de 50 proyectos comunales dedicados al uso sostenible de los recursos naturales y conservación del ambiente procedentes de 16 regiones del Perú.
En este evento se puede ver y adquirir productos ecológicos y artesanías elaboradas dentro de los proyectos locales de distintas parte del país tales como miel de abeja orgánica, finas prendas de vestir tejidas a mano, cremas y pomadas en base a plantas medicinales, así como muebles de junco y artículos de madera, entre otros.