El Perú asiste a la COP15 que discute lucha contra la desertificación

COSTA DEL MARFIL. El involucramiento del sector privado en proyectos de restauración y protección de ecosistemas en el Perú, así como la asistencia técnica del para el desarrollo de acciones y políticas en el marco de la “Iniciativa de Sequía”, son algunos de los temas que el Perú promueve en la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación.

Ello en el marco de la décimo quinta Conferencia de las Partes (COP15), que tiene lugar en Abiyán, Costa de Marfil. En dicha reunión global, en la cual el Perú está presente a través de la representación del Ministerio del Ambiente, también se debatirá cómo implementar con mayor efectividad las medidas voluntarias de Neutralidad de Degradación de la Tierra, que en el Perú contempla no incrementar o disminuir el porcentaje de tierra degradada mediante prácticas sostenibles al año 2030.

Según el secretario ejecutivo de la Convención, Ibrahim Thiaw, el objetivo de esta cumbre global es atender los desafíos de la degradación de la tierra y la sequía. Al respecto, Cristina Rodríguez, directora en Adaptación al Cambio Climático y Desertificación, que viene participando de la cumbre, señaló que “la desertificación es resultado de la degradación del suelo, la sobreexplotación y el uso inadecuado de la tierra, que se agudiza a consecuencia del cambio climático”.

En el acto inaugural, el secretario ejecutivo de la Convención, Ibrahim Thiaw, señaló que la frecuencia y la intensidad de las sequías observadas en los últimos años tienen una relación comprobada con el cambio climático. “La sequía no es sólo la falta de lluvia, también tiene un rostro humano que afecta a los más vulnerables, incluidos los agricultores, los pequeños productores, las mujeres y los niños”, sostuvo.

Bajo el lema “Tierra, vida, patrimonio: de un mundo precario a un futuro próspero”, la COP15 hace un llamado a la acción para adoptar medidas eficaces ante la rápida degradación de espacios naturales en el planeta, informó el Minam.