En la región central del Perú, la actividad sísmica está asociada al proceso de subducción de la placa de Nazca bajo la Sudamericana, siendo la responsable de dar origen a un número ilimitado de sismos de diversas magnitudes y a diferentes niveles de profundidad. En esta región una de las zonas que más ha llamado la atención a la comunidad científica, es la presencia de un gran número de sismos con epicentros que van entre 150 y 200 km de profundidad en el entorno de la ciudad de Pucallpa. A esta actividad sísmica de foco intermedio se le ha denominado “Nido de Pucallpa”.
Actualmente la región de Pucallpa presenta la tasa más alta de actividad sísmica a profundidades intermedias a comparación de otras regiones, teniendo un rango de 10 sismos por mes; es decir, 5000 veces más que los sismos que ocurren en las áreas circundantes y aunque no se cuenta con información histórica de eventos que hayan causado pérdidas de vidas humanas y materiales, no se puede descartar que en un futuro que esta actividad sísmica constante pueda generar daños materiales, sobre todo, si la población actual es de aproximadamente más de 326 000 habitantes.
En ese sentido, el Instituto Geofísico del Perú viene realizando estudios en el denominado “Nido de Pucallpa” para tratar de comprender las características sísmicas de la fuente generadora de esta actividad sísmica haciendo uso los datos de la Red Sísmica Nacional (RSN).
Asimismo, para complementar estas investigaciones se analiza el régimen de esfuerzos tectónicos correspondientes a la contorsión y deformación de la placa de Nazca, para tratar comprender los procesos de deformación interna que soportaría la placa oceánica a estos niveles de profundidad; es decir, en el “Nido de Pucallpa”. En ese camino, el IGP sigue haciendo “ciencia para protegernos, ciencia para avanzar”.