La semana que pasó, tuvo varios hechos interesantes que me gustaría comentar. Por un lado el gobierno del doctor Alan García, decidió disolver, si, disolver, su errado afán de disolver legalmente a una de las organizaciones más representativas de los pueblos indígenas, AIDESEP, con quien dicho sea de paso, se sienta desde hace mas de 5 meses atrás, en las cuatro Mesas de Diálogo.
Es decir una ambigüedad absoluta que deja mucho que pensar, pues pareciera que este tipo de “errores” serian parte de una estrategia dirigida a generar retrasos o provocar reacciones en los pueblos indígenas que lo lleven a patear el tablero y retirarse de las Mesas de Dialogo, dejando así la sensación en la opinión pública que los que nunca quisieron dialogar fueron las Comunidades indígenas.
Felizmente la madurez de los pueblos indígenas ha demostrado que no caerán tan fácil en estas burdas maniobras que solo muestran la debilidad de un Gobierno para asumir con responsabilidad y madurez un tema de tanta importancia para todos.
El asunto no culmina con el retiro del pedido de disolución de AIDESEP, aun quedan pendientes otros como el hostigamiento judicial dirigido a varios dirigentes nativos -muchos de ellos participantes de las Mesas de Diálogo- lo cual no ayuda a generar un clima de paz para un dialogo fructífero.
Las organizaciones Nativas están haciendo lo suyo con responsabilidad, asisten a las Mesas de Diálogo y hacen llegar sus propuestas, sin embargo el Gobierno como en el caso de la Mesa 4 ha incumplido contantemente con sus compromisos y en varios momentos han dejado solos a los representantes indígenas, quienes hacen el sacrificio de venir desde muy lejos para cumplir con sus pueblos.
En la Mesa 2, ya existe un documento bastante consensuado sobre lo que debería contener la nueva Ley Forestal, que mas allá de algunos detalles por resolver, estaría casi listo para ingresar al Grupo Nacional (espacio superior a las Mesas de Dialogo y de carácter resolutivo) para su aprobación, así como también tras haber presentado una propuesta sustentada de derogatoria de varios DLs, los indigenas estan a la espera de la propuesta del Gobierno, que esperamos esta semana exista un acuerdo final.
En la Mesa 3 donde se ve el tema de Consulta previa, la propuesta Indígena que recoge en gran parte la propuesta de la Defensoría del Pueblo, estaría también a la espera de la propuesta del Gobierno.
Por otro lado, la Dirección General Forestal y Fauna Silvestre, DGFFS con Miguel Rosas a la cabeza, ha decidido después de una larga, pero muy larga espera, retomar el proceso de actualización de la Ley Forestal, disque los tramites burocráticos al interior del Ministerio de Agricultura dificultaron la contratación de los consultores para realizar esta tarea, lo cierto es que cuanto más se demore la salida de la nueva norma, sumado a la salida oportuna de los DS 016 y 017, hay más de uno que se está beneficiando con la demora, que por supuesto no son la mayoría de los actores del Bosque (casualidad muy conveniente para algunos).
El señor Rosas ha dicho que ahora si se hará el proceso y que esperan a Febrero tener un texto acabado para su consulta, claro para esa fecha el Congreso estará en receso y habrá que esperar a Abril para que se debata y apruebe (siendo por supuesto optimistas), así como el Gobierno Norteamericano esperando que el país cumpla con sus compromisos de mejorar el sector.
Lo cierto es que para esas fechas muchas Caobas, Cedros, Maderas duras, entre otras especies, ya no estarán en nuestra Amazonía; a este paso sería bueno mirar las economías de algunos funcionarios y empresarios que de seguro estarán más robustas que las alicaídas economías de nuestros hermanos amazónicos.
Pero no todo anda mal en el sector forestal, en medio de todo esto, OSINFOR ha tomado como estrategia dialogar y concertar con la sociedad civil para mejorar sus normas, planes y estrategias, en el entendido que solo así podrá cumplir mejor sus responsabilidades y poner en práctica la transparencia forestal requerida para la gobernabilidad necesaria para el manejo sostenible de nuestros Bosques, mucho más cuando hoy existe la necesidad de organismos del estado que realmente hagan cumplir lo establecido en las leyes.
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