El futuro del VRAE se encuentra en los productos orgánicos

A excepción de los cultivos ilegales de coca, todas las otras plantaciones que se producen en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, como el cacao y el café, son productos cien por ciento orgánicos y en cuyo proceso de crecimiento no intervienen productos químicos.


 


Así lo señaló  Edgar Gómez, director Ejecutivo del Servicio Nacional de Sanidad Agraria, SENASA-VRAE quien resaltó el papel de su institución como impulsor de la producción orgánica y del monitoreo y control de las empresas de la zona que certifican como productores agrarios.


 


El funcionario explicó que un campo orgánico deber ser un espacio donde no hayan entrado plaguicidas u otros productos agroquímicos no permitidos durante un tiempo pre determinado. Asimismo, precisó que el entorno inmediato debe estar limpio y preservado.


 


“Si soy un productor orgánico y tengo mi vecino que tiene plantaciones de hoja de coca con una alta producción de agroquímicos; mis productos, simplemente, dejan de ser orgánicos y no obtendrá la certificación orgánica porque el medio ambiente cercano está contaminado” señaló el director ejecutivo del SENASA  


 


Por ello señaló que tras un trabajo cultural orgánico que viene impulsando el SENASA, a través de las escuelas de campo, se está capacitando a los productores a evitar el uso de productos agroquímicos para eliminar las plagas, sobre todo, en las plantaciones de caco y café.


 


Resaltó que la producción orgánica es el boom del futuro del VRAE, debido a los altos precios que obtienen en el mercado internacional y a la gran demanda que tienen en  los mercados de los países desarrollados.


 


“Tenemos una gran oportunidad que no podemos desperdiciar para incrementar los ingresos de nuestros productores; en esa dirección debemos comprometernos todas las instituciones estatales y los propios productores” precisó.