El Estado debe priorizar la educación en zonas fronterizas para frenar al narcotráfico

El analista político y periodista Agustín Figueroa identificó al narcotráfico y la baja calidad de la educación como los mayores problemas que enfrenta el país y que contribuyen al retraso y a la pobreza de zonas con gran influencia cocalera ,como por ejemplo los valles de San Gabán y Alto Inambari, ubicados en Puno, en la frontera con Bolivia.


 


Dijo que esos lugares se encuentran influenciados por sectores radicales quechuas y aymaras de Bolivia que propician el cultivo indiscriminado de la hoja de coca y que ocasionan desestabilización en el Perú.


 


Puntualizó que en esa zona  el panorama es complicado porque ahí solo llegan los mensajes del presidente Evo Morales, quien “estuvo metido por muchos años en la producción de hoja de coca para su venta ilegal al narcotráfico”.


 


Por ello, demandó al gobierno peruano que contrarreste esos mensajes y  emita contenidos efectivos y ejecute acciones concretas de desarrollo.  


 


El analista político consideró que actualmente el narcotráfico “tiene más fuerza que antes y por ello debe ser combatido al más alto nivel”,  y en ese sentido pidió priorizar el tema educativo en beneficio de los peruanos que viven en zonas de frontera, especialmente en la que se comparte con Bolivia.


 


“Cuando los niños del Perú acaban el sexto año de primaria y no saben leer, en sus cerebros hay ausencia del Estado y ésa es una responsabilidad de todos nosotros”, dijo Figueroa.