Circulan en el mercado negro de las primicias dos facturas de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) giradas vía el Banco de la Nación. Se trata de un equipo de interceptación telefónica de US$ 900 mil –y otros aditamentos por US$ 99 mil– comprado a una empresa israelita.
CARETAS consultó con fuentes cercanas a la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), que confirmaron que la adquisición se hizo para esta entidad. La compra se realizó entre octubre y noviembre del año pasado, en el marco del proceso de “repotenciación de inteligencia electrónica” que tiene cuatro objetivos de combate contra la delincuencia y el narcotráfico: el VRAEM, el Huallaga, el Putumayo y las rutas que exportan droga por los puertos del norte del país
A diferencia de los “maletines” de antaño, este equipo de última generación, llamado de “intrusión y seguridad protectiva de comunicaciones”, se asemeja más a una laptop con un poderoso escáner. Y se alistan para comprar otros juguetes. Entre ellos destacan nuevos equipos de los llamados Contra-contra Medidas (“Cocomed”) para interceptar las comunicaciones más protegidas.
La DINI está facultada legalmente para realizar escuchas en coordinación con la fiscalía especializada correspondiente. Si bien la embajada de Estados Unidos financia en Dirandro el plan “Constelación” que incluye la interceptación de comunicaciones, los gringos deben autorizar cualquier procedimiento. ¿Tiene esto relación con las recientes denuncias del exministro Fernando Rospigliosi sobre espionaje político? En la DINI aseguran que los equipos funcionarán únicamente con autorizaciones judiciales y que la compra se encuentra tan ajustada a ley que se hizo vía Banco de la Nación.
El dinero con el que se compró el equipo no forma parte de la discutida partida de S/. 76.9 millones destinada a gastos reservados de la Dini para este año, cuadruplicada en relación al 2012.