El APRA está echando por la borda su historia como partido político con hechos como el escándalo sobre las licitaciones petroleras, que involucra a personas ligadas a la agrupación de la estrella, afirmó el ex presidente de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, Salomón Lerner Febres.
«El APRA es un partido que, con tantos años de historia y con un fundador que ha ganado un lugar dentro de la vida intelectual y política del país como Haya de la Torre, lamentablemente a la hora de llegar al Gobierno está desconociendo toda una serie de héroes, mártires y teorías de defensa de los más pobres. No sé si un partido pueda resistir toda esta especie de cáncer interno», expresó Lerner Febres en diálogo con un diario local.
Como se recuerda, el domingo, Cuarto Poder difundió cuatro audios que demostrarían un negociado entre el ex ministro aprista Rómulo León y el ex integrante del directorio de Perupetro, Alberto Quimper, para facilitar la concesión de cinco lotes petrolíferos en favor de la empresa noruega Discover Petroleum.
En ese sentido, Lerner criticó que el partido oficialista mantenga dentro de sus bases a gente cuestionada y solo tome acciones cuando surgen problemas, como ocurrió con León Alegría, quien fue expulsado del APRA luego de conocerse la denuncia periodística.
«Lo que sí llama la atención es que en el Partido Aprista personas con un pasado probadamente criticable como el señor León tengan todos los accesos a los cuales ha llegado para conseguir favores políticos. Esto no es ético», resaltó.
Debido a ello, Salomón Lerner consideró que debe existir una seria depuración al interior del APRA, pues «es una contradicción absoluta que dentro de una agrupación en donde se pretende servir al país se admita a gente corrompida».
Alan García habría conocido el tema antes de conocerse los audios
En otro momento, Lerner remarcó que las acciones tomadas por el mandatario Alan García tras las estallido del escándalo «lejos de ser un mérito son un demérito» pues la mañana del domingo, antes de conocerse la denuncia, dejó entrever que conocía las irregularidades al manifestar que no le temblaría la mano para castigar a las personas que promuevan la corrupción en su régimen.
Asimismo, manifestó que confía en la honestidad del primer ministro Jorge del Castillo, quien fuera implicado en las negociaciones en un reciente audio, aunque afirmó que «la mujer del César no debe ser honesta, también tiene que parecerlo, sobre todo en la vida pública»