(Associated Press) Brasil y Ecuador firmaron ayer 15 acuerdos, entre ellos sendos convenios para estudiar proyectos conjuntos de producción de biocombustibles y para que sus empresas estatales petroleras participen de forma conjunta en la explotación de un campo de crudo en el Amazonas ecuatoriano.
Los acuerdos fueron firmados por representantes de los dos países y durante la visita de un día que realiza el presidente de Ecuador, Rafael Correa, a Brasilia.
**Vamos a apoyar a Ecuador en su programa nacional de biocombustibles**, dijo el anfitrión Luiz Inácio Lula da Silva. **Queremos enfrentar juntos el desafío de transformar la matriz energética mundial**, añadió en un discurso en el palacio de gobierno y con Correa a su lado.
Brasil y Ecuador son productores de petróleo para su abastecimiento interno y exportadores, pero **nuestros países están determinados a impulsar esta revolución de energía limpia y renovable, generadora de empleo y capaz de preservar nuestras selvas**, dijo Lula.
Por su parte, Correa expresó en su discurso que los convenios firmados en el área de biocombustibles mostraban la decisión del gobierno de Quito de «desarrollar aceleradamente la producción de biocombustibles en nuestro país… no sólo como energía alternativa, amigable ambientalmente, sino también como un medio para recuperar ese sector tan golpeado, como ha sido el sector agrícola ecuatoriano y un medio también para redistribuir riqueza**.
Entre los 15 acuerdos firmados, están dos entre las estatales Petróleo Brasileiro SA (Petrobras) y la ecuatoriana Petroecuador: uno para participar en forma conjunta en la exploración y producción del bloque llamado Ishpingo-Tambococha-Tiputini o ITT, de unas 190,000 hectáreas, ubicadas en la zona oriental del Amazonas ecuatoriano, dijo Petrobras.
El bloque ITT, situado en el parque Nacional Yasuní –una reserva de biósfera declarada por la Unesco– posee reservas cercanas a los 1,000 millones de barriles de crudo, según ha dicho Carlos Pareja, presidente de Petroecuador.
La explotación del campo, sin embargo, aún requiere del visto bueno de las autoridades ambientales ecuatorianas.
**Este campo es de enorme importancia para nuestro país, sin embargo, está situado en una zona muy sensible ecológicamente, en el borde del parque nacional Yasuní, por ello, en una acción innovadora, el gobierno ecuatoriano ha dicho claramente al mundo, que la alternativa para el campo ITT es la explotación con la minimización del impacto ambiental o dejar el crudo represado en tierra, pero con una justa compensación por parte de la comunidad internacional**, dijo Correa.
El segundo acuerdo firmado entre Petrobras y Petroecuador es para estudiar las posibilidades de proyectos conjuntos de producción y distribución de biocomustibles en Ecuador, indicó Petrobras.
Los otros acuerdos van desde la cooperación técnica en salud, educación, intercambio de diplomáticos y defensa, para realizar ejercicios militares conjuntos e intercambiar información sobre experiencias del uso de armamentos.